Penzini Analítica: Venezuela obligada a pagar «chin chin»
China cerró el grifo al país en el peor momento de su crisis financiera, cortando el chorro habitual de préstamos y aumentando así el riesgo y la incertidumbre que sufren los inversionistas en Venezuela. De acuerdo al presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, China le negó nuevos créditos al gobierno venezolano por las violaciones que el ejecutivo le ha hecho a la Constitución.
China y el «Inter-American Dialogue»
China ya no está interesado en prestarle más dinero a Venezuela. Esta polémica declaración la reveló Margaret Myers, directora del «Inter-American Dialogue» un firma de investigación de Washington que hace seguimiento a los préstamos realizados entre China y Latinoamérica, durante una entrevista con el periodista Patrick Gillespie de CNN,
La directora del instituto dice que Venezuela es el país que ha recibido más dinero de China que cualquier otro de la región. El monto asciende a unos $60 millardos de dólares de los que todavía se adeudan unos $20 millardos, los cuales según algunos expertos, no podrán ser cancelados por la inmensa crisis que vive el país, a pesar que se siguen enviando diariamente barriles de crudo al país asiático.
En total, PDVSA sigue enviado unos 579,000 barriles diarios a China de acuerdo a los informes en su auditoria financiera.
De acuerdo a una publicación de Derek Scissors, un analista residente del American Enterprise Institute «los chinos han permitido que el gobierno venezolano cometa estupideces, pero ahora no quieren permitir que los venezolanos sigan siendo estúpidos con el manejo de los préstamos».
El experto manifiesta que el presidente socialista Nicolás Maduro dirige un régimen que ha despilfarrado los recursos e impulsado a la economía a una crisis y ya China perdió la paciencia.
Scissors hace referencia a que la producción de petróleo del país ha caído a un mínimo en los últimos 13 años, y que la empresa Schlumberger ha reducido sus operaciones dramáticamente por la falta de pagos del gobierno venezolano.
Por su parte, el periodista de CNN advierte que este corte de nuevos préstamos de China a Venezuela llegó en el peor momento, porque el país ya entró en barrena hacia una crisis económica y humanitaria.
Empresas chinas
De la misma manera que el gobierno chino, las empresas de ese país han perdido el interés de invertir en Venezuela.
De unos 2.500 millones de dólares anuales que invertían en proyectos en el país en el año 2010, para el primer semestre de 2016 solo han invertido $300 millones, de acuerdo al Inter-American Dialogue.
También hace referencia a que la empresa constructora de ferrocarriles «China Railway Engineering Company» detuvo la construcción de un tren bala, que era un símbolo de las relaciones florecientes que habían entre China y Venezuela, de las cuales ahora solo quedan ruinas abandonadas.
China veía en Venezuela a un aliado estratégico, al cual le daban recursos financieros e infraestructura a cambio de asegurarse el suministro energético.
Pero las ambiciones de China se estrellaron contra la pared por la crisis que apunta a una escalada de inflación de 700%, que la economía se contraiga un 8% de acuerdo a las proyecciones del FMI, que la moneda ha perdido todo su poder adquisitivo y que la mayoría de los expertos piensan que podría entrar pronto en un default de sus pagos.
El asesor financiero de la banca de inversión Goldman Sachs, Mairo Roca, aseguró que China dejó de ser el prestamista de último recurso para Venezuela, país que vive una profunda crisis, pero las cosas todavía se pueden tornar mucho peor.
China desde la Asamblea
El presidente de la Asamblea Nacional, aseguró que el gobierno de China suspendió los prestamos a Venezuela por violaciones a la Constitución. Además señaló que la problemática entre los poderes Ejecutivo y Electoral causó el cierre del financiamiento del mercado internacional.
Ramos Allup escribió en las redes sociales: «Negativa de nuevos créditos chinos y de otros países al Gobierno se debe a violaciones a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y por no enviar contratos de interés nacional a la Asamblea”.
Conclusión
La terquedad del Ejecutivo a reconocer la voluntad popular representada en la Asamblea Nacional está trayendo graves consecuencias. El hecho de no reconocer el poder legislativo sumado al entrampamiento de una ideología que se resiste a cambiar un modelo económico, les cierra poco a poco la capacidad de maniobra financiera internacional. El hecho de haber perdido a China como aliado es prueba irrefutable de ello. Peor aún, todos los préstamos, canjes de bonos y financiamiento, de no haber sido aprobados por la Asamblea podrían correr el riego de no ser pagados a su vencimiento por poder ser considerados ilegítimos e ilegales, a pesar de que se puedan amparar en la Ley de emergencia economía para ser aprobados.
En Venezuela la expresión «chin chin» significa comprar, adquirir o pagar algo con el dinero completo y sin quedar debiendo nada. Si el Ejecutivo no logra convencer a los mercados internacionales de la legalidad de sus acciones y sigue violando la Constitución tendrá que pagar todo «chin chin».
