Penzini Analítica: El puente del sentido común y no de la ideología para salvar la economía
Se desató la inflación. De acuerdo al último reporte del Cendas-FMV, la canasta alimentaria familiar subió a Bs.363.866,73 en julio.
Es decir, que la canasta alimentaria aumentó en apenas un mes más de 86.000 bolívares y por primera vez en la historia de este indicador, su precio alcanzó al de la canasta básica familiar del mes pasado.
Ya una familia necesita ganar 16 salarios mínimos solamente para lograr comer.
Lo peor es que no se vislumbra ningún plan ni tampoco nuevas políticas económicas para lograr frenar la inflación y aumentar la producción para el 2017.
Más bien se insiste en la política de controles y ahora exhortan a la clase obrera a tener más control de la producción y ordenan asignar un General en Jefe para cada rubro alimenticio, a fin de “mostrar un mapa de comercialización y distribución de ese rubro.” Ideas marxistas leninistas que históricamente se sabe que no van a funcionar.
De hecho Conindustria denunció que siguen cerrando las pocas empresas que quedan.“Hace 17 años existían 12.700 empresas y hoy sólo quedan 4.000”, es decir que funciona menos de un tercio del parque industrial venezolano. De acuerdo a la institución esta situación refleja el nivel de empobrecimiento que vive el país y a 5 meses de finalizar 2016 “el Gobierno nacional no ha tomado ninguna medida para reactivar las empresas del país”.
Y las cosas se pueden poner mucho peor.
Esa es al menos es la opinión de un profesor de la prestigiosa Universidad británica de Oxford, el venezolano José Manuel Puente.
El profesor, y también investigador del IESA señaló en el programa «Con todo y Penzini » transmitido por Globovisión que si no hay un cambio drástico en la política económica, la inflación de 2017 se estima que podría llegar a más de 3.000%.
Sobre los niveles de desabastecimiento destacó que “el segundo semestre de 2016 será peor que el visto durante el primer semestre” y agregó que “el Gobierno está asumiendo que la crisis que atravesamos es un problema militar y no de política económica».
Sugirió al Gobierno hacer una revisión completa de los controles de precios para que estos cubran los costos de producción porque de lo contrario no aparecerán los productos en los anaqueles.
De acuerdo a Puente «si el Gobierno sigue con la terquedad de no cambiar el modelo económico, la inflación en el 2017 superará el 2000%»
El profesor hizo referencia a un reciente trabajo de investigación titulado ¿Podría Venezuela sufrir en el 2016 el peor desempeño macroeconómico del mundo? En base a proyecciones e indicadores del desempeño económico del país, el informe llega a la conclusión que «ciertamente Venezuela podría tener el peor desempeño macroeconómico del planeta en el 2016».
Según el estudio Venezuela es el país que presenta la peor tasa de crecimiento del mundo con un 10% negativo seguido por Sudán con -7.8% y Guinea con -7.4%.
También presenta la tasa de inflación más alta del mundo, de 720%, seguido por Sudán con 119% y Yemen con 32%.
Sobre estas cifras Puente concluye que Venezuela va a vivir una fuerte contracción económica, combinada con la inflación más alta del mundo y niveles de escasez nunca antes vistos en la sociedad venezolana.
De cumplirse estos resultados Venezuela se ubicaría como la economía con el peor desempeño macroeconómico del mundo al cierre de 2016. La gran incógnita sigue siendo cuándo y cómo terminará este «muy inestable equilibrio» económico y político de Venezuela.
En la entrevista José Manuel Puente enfatizó en su conclusión final que «el Gobierno no parece estar dispuesto a hacer cambios en el ámbito económico» por lo que instó a los venezolanos a buscar un cambio político para que pueda haberlo también en el manejo de la economía.
Según Puente «el problema de la economía venezolana no es ideológico, sino de sentido común». Y será muy difícil que lo apliquen por estar entrampados en una ideología política, por lo que vale la pena recordar las sabias palabras que una vez dijo el ex primer ministro británico Winston Churchill: «el sentido común es el menos común de los sentidos».