Alumnos y profesores de USB Litoral se declaran en emergencia
A partir de este miércoles 15 de mayo, tanto los estudiantes como el personal docente, administrativo y obrero de la Universidad Simón Bolívar, Sede Litoral, se quedaron sin transporte, luego de que el Ministerio de Educación Universitaria incumpliera una vez más con el compromiso de garantizar los recursos para cubrir este y otros gastos en servicios esenciales como el comedor o el mantenimiento de las instalaciones.
Ante la crítica situación, tanto profesores como personal y estudiantes se declaran en emergencia y se suman a las acciones de protesta y reclamo con una movilización hasta el Ministerio.
Raúl Pulido, delegado laboral del Universidad Simón Bolívar, Sede Litoral, y representante de la Asociación de Profesores ante la Comisión de Servicios, señaló que “hoy nuevamente podemos decir que el Ministerio de Educación hace un jaque a la universidad, violentando el artículo 103 de la Constitución que establece la gratuidad de la enseñanza hasta el pregrado universitario, por cuanto ha hecho caso omiso a las solicitudes de dinero que se han requerido para cancelar compromisos de transporte, comedor, mantenimiento y otro aspectos esenciales para la universidad en sus dos sedes”.
Advierte que la situación limita a los estudiantes de escasos recursos poder acceder a los estudios universitarios, propiciando inclusive el abandono de las actividades académicas, al no contar con servicios tan esenciales e importantes como lo son el transporte y el comedor.
Las fallas en el servicio de agua conllevan a que sólo un 20% de los baños puedan ser habilitados en horarios especiales, para tratar de garantizar el saneamiento de los mismos.
“Esta situación se traducirá en que muchos jóvenes no podrán llegar a la universidad motivado pues para ellos es imprescindible el servicio de transporte. Son más de 100 unidades que prestaban servicio, incluyendo los contratados y hasta el día de ayer se pudo mantener sólo a once unidades. El servicio queda paralizado y ni la misma universidad podrá mantener el servicio ya que no tiene recursos”, declaró Pulido.
Adicional al tema de la crisis de los servicios básicos como el transporte, comedor y el agua, se suman los “sueldos deficientes” que devengan los profesores y que sólo alcanzan para “comprar dos kilos de queso”. Al respecto, Pulido advierte que los salarios son deplorables y que la emergencia universitaria se traduce en una escalada de acciones que se iniciaron con la movilización ante el Ministerio hasta llegar a la paralización de las actividades académicas.
“La situación de las dos sedes de la USB van en decadencia de la educación universitaria y es por ello que en ambos casos nos sumamos a las acciones convocadas por la Fapuv y la Fenasip para exigir un mejor presupuesto para los servicios esenciales y vitales para el funcionamiento de esta casa de estudios superiores”, dijo.