Sugerencias para contrarrestar la hegemonía cultural del PC. Proposiciones para propender a una cultura humana
La responsabilidad del Estado
De acuerdo al principio de subsidiariedad, el Estado debe dar incentivos que creen espacios para que las personas y las instituciones intermedias desarrollen sus expresiones culturales, sin orientación política determinada, salvo el respeto a la dignidad y naturaleza del ser humano, no como está ocurriendo en estos 30 años de gobiernos de izquierda o simpatizantes como el actual, donde la cultura en general y el Ministerio de la Cultura en particular están controlado por la izquierda y por el PC aplicando la Hegemonía Cultural de Antonio Gramsci.
Por ello no implica que el Estado efectúe el mismo las políticas propuestas, pero sí que establezca un marco legal y tributario que favorezca su realización.
Favorecer la formación cívica: Formar ciudadanos y mejorar Capital Social.
Lo más urgente es formar ciudadanos mejorando mediante la educación el déficit de capital social que adolece Chile.
Un conjunto de campañas tendientes a aumentar la cultura cívica de los chilenos y emigrantes que se traduce en un uso apropiado de los bienes públicos y respeto de las instituciones y autoridades en el cumplimiento de sus deberes como ciudadanos. Por ejemplo, obediencia de las leyes del tránsito, el uso apropiado y cuidado de las calles y áreas verdes, respeto del prójimo en lugares públicos. Una mayor cultura cívica implica el cumplimiento de los deberes propios y un respeto práctico por los demás, lo que se traduce en una mejor calidad de vida. Terminar con la impunidad de los vándalos. Mejorar el lenguaje en los programas de TV, radio y la prensa.
En la raíz de su éxito está el capital social nuevo hallazgo de las ciencias del desarrollo, detectado en los estudios pioneros de Putnam(Harvard), abarca por lo menos cuatro dimensiones:
- Los valores éticos dominantes en una sociedad;
- Su capacidad de asociatividad;
- El grado de confianza entre sus miembros y
- Conciencia cívica.
Los resultados de las mediciones econométricas son concluyentes: ¡cuanto más capital social, más crecimiento económico a largo plazo, menor criminalidad, más salud pública, más gobernabilidad democrática!
El Premio Nobel de Economía Amartya Sen complementa: “Los valores éticos de los empresarios y los profesionales de una país(y otros actores sociales clave) son parte de sus recursos productivos”. Si son a favor de la inversión, la honestidad, el progreso tecnológico, la inclusión social, serán verdaderos activos; si, en cambio, predominan la ganancia rápida, fácil e ilegitima, la corrupción, la falta de escrúpulos, bloquearán el avance.
Con la lamentable experiencia de la colusión, la mala clase política actual, el desastre del SENAME, el vandalismo manipulado por la extrema izquierda y narcotráfico, consumo y tráfico de drogas en las poblaciones, el futuro gobierno de JAK deberá prestar mucha atención a estos factores del capital social que es necesario fortalecer y que pueden desempeñar un papel muy importante. ¡Qué duda cabe!
Proteger la memoria histórica:
Es fundamental conservar las raíces nacionales para tener una cultura propia y creativa. En consecuencia, es necesario promover una política de mantención de la memoria de Chile. Para ello, se incentivará el cuidado de los archivos y museos existentes y se favorecerá la constitución de nuevos. En cada región, se fomentará la realización de catastros que contemplen sus características geográficas, de flora, fauna, historia y personajes más propios, al igual que una política de conservación de construcciones y edificios. Se deberá incluir la historia y la ética en la malla curricular en escuelas y liceos y colegios públicos y privados.
Se deberá vigilar y evitar que se tergiverse la historia patria y sus valores nacionales y condenar a los infractores, sobre todo, a los pseudos historiadores comunistas y encima elegidos como convencionales.
Respetar la raíz cultural occidental:
Otra raíz de la cultura nacional son los valores de la sociedad cristiana-occidental. Además, ellos son concordantes con una cultura humana que propenda a un desarrollo enriquecedor del hombre y, con el fundamento de virtudes políticas sólidas que permiten una democracia estable y al servicio del bien común. Por ello, se propenderá a que los programas de educación básica y media contemplen la formación en estos valores a fin de contrarrestar la influencia del nuevo Comunismo Gramsciano o Hegemonía Cultural, que pretende destruir nuestra Cultura Judeo Cristiana.
Promover los libros:
Pero una cultura fructífera no sólo requiere de tradiciones, sino que también de innovación. En ese sentido, el libro es el medio que por esencia permite abrir nuevos mundos al espíritu y disminuir los abismos culturales entre las naciones y entre los diferentes grupos sociales de un mismo país.
A Chile llega una parte muy pequeña de la ya pequeñísima proporción de obras que se traducen al castellano y, además, a precios prohibitivos castigados por el 19% de Iva. Al igual como se establecieron zonas francas para desarrollar las regiones, se idearán políticas audaces para expandir la oferta de libros y fomentar la lectura de ellos, para contrarrestar el escaso hábito de lectura y por ende, la desinformación de los jóvenes estudiantes y evitar que sean presas fáciles de manipuladores profesionales de izquierda.
Una de las grandes amenazas para el arte es la fuerte comercialización que éste ha experimentado, en que lo bello y lo bueno lo decide el mercado, al que muchas veces el artista termina sometiéndose, traicionando su vocación. Para romper esta tendencia, se destinará un presupuesto anual para adquirir un número determinado de pinturas y esculturas para los museos, de acuerdo a bases objetivas y a través de un jurado de cualidades irrefutables.
Tender puentes entre cultura y televisión:
Establecer un fondo concursable para financiar programas de televisión destinados a descubrir profesores universitarios amenos y destacados en filosofía, literatura, historia, arquitectura, música y arte, que conversen sobre su materia en tertulias que deberían atraer audiencias mayores que los programas de conversación política, de concursos y sensacionalistas.
Llevando a la práctica estas sugerencias por el futuro gobierno de JAK. contrarrestará la estrategia del Comunismo Gramsciano o Hegemonía Cultural del Foro de Sao Paulo, disfrazado de Grupo de Puebla. El Ministro de Cultura ideal para ejecutarlo sería el valiente intelectual, escritor, catedrático, político chileno/sueco Dr. Mauricio Rojas, autor del excelente ensayo “El Libro Negro del Comunismo Chileno”.(*)
Francisco Javier Vargas Galindo, Ex Profesor UCAB., Caracas, Magister en Ciencias Militares, Mención en Conflictos y Negociación Internacional, Academia de Guerra del Ejército de Chile(ACAGUE. 2006).