Sr. Papa: por favor, no siga ayudando así a Venezuela
El santo padre acaba de hablar sobre Venezuela. Dice:
“Hubo una intervención de la Santa Sede bajo pedido fuerte de los cuatro Presidentes que estaban trabajando como facilitadores. Y la cosa no resultó. Y quedó ahí. -No resultó porque las propuestas no eran aceptadas, o se diluían, era un sí-sí, pero no-no. Todos conocemos la difícil situación de Venezuela, que es un país al que yo quiero mucho. -Y sé que ahora están insistiendo, no sé bien de dónde, creo que de los cuatro presidentes, para relanzar esta facilitación y están buscando el lugar. Yo creo que tiene que ser con condiciones ya, condiciones muy claras. -Parte de la oposición no quiere esto. Es curioso, la misma oposición está dividida, y por otro lado parece que lo conflictos se agudizan cada vez más. -Pero hay algo en movimiento. Estuve informado de eso, pero está muy en el aire todavía. Pero, todo lo que se puede hacer por Venezuela hay que hacerlo, con las garantías necesarias, si no jugamos al “tin tin pirulero”, y no va la cosa”.
Es esto todo lo que tiene que decir sobre Venezuela un hombre de su estatura moral, cabeza de la iglesia católica, quien debe estar bien enterado de lo que sucede y ha sucedido en Venezuela durante todos estos años, que debe saber qué hace un mes el país está de pie en contra de una narco-dictadura cruel y abominable, que debe conocer de la muerte de más de 30 venezolanos, a manos de la represión militar y criminal?
Sus declaraciones sobre Venezuela hablan de la posibilidad de reiniciar un diálogo. Aunque advierte que este diálogo, de re-iniciarse, debe tener “condiciones claras”, no hay dudas de que está reabriendo la posibilidad. Y la está reabriendo hablando de los mismos cuatro “facilitadores” ampliamente desacreditados ante el pueblo venezolano, mercenarios del narco-régimen.
Peor aún, Francisco se permite definir como cosa rara que haya gente de la oposición que ‘no desea el diálogo”. Después de un mes de crisis abierta en Venezuela el Papa dice que “parece que los conflictos se agudizan”. Dice que “algo se está moviendo, los facilitadores buscan un sitio de reunión”. En estas declaraciones el Papa aparece promoviendo otro intento de diálogo.
Estas tristes y frívolas declaraciones del Papa Francisco obligarán a nuestra admirada Iglesia católica venezolana a tratar de interpretar positivamente sus palabras. Pero es que una y otra vez el Papa parece abrir la boca para desanimar a los venezolanos, para desmontar las protestas de los venezolanos, para insistir en una negociación inmoral que él – como jefe de la Iglesia – debería ser el primero en rechazar. Su comportamiento en Cuba y, ahora, en Venezuela, nos alejan de él.
Papa Francisco, no defienda así a Venezuela. Su silencio sería preferible. Debe usted respetar la decisión de los venezolanos dignos de rebelarse contra una narco-dictadura, con la cual no puede haber negociación posible. Debería ser usted el primero en comprenderlo así.