Si canto se hunde el socialismo español

El “Pollo” Carvajal, detenido en Madrid para ser extraditado, habría recordado lo mucho que sabe sobre la corrupción del socialismo español con Venezuela

Si lo picotea, el psoecialismo se desinfla

La Justicia española decide estudiar con calma lo de la extradición

Y no es cosa de un par de chismes, el general es un experto en inteligencia e información que conoce cada detalle de peligrosos lazos del PSOE que gobierna ahora en España y el castrosocialismo que tiraniza a Venezuela. Tiene en el buche demasiados nombres, acciones, favores y compromisos, y Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, además de José Luis Rodríguez Zapatero, entre otros, podrían salir con las tablas en la cabeza.

Es de recordar que ya hace años España debió cambiar a su embajador en Venezuela por el descubrimiento de negocios non sanctos de ese embajador, o  de su hijo con su intermediación, con funcionarios del gobierno de Hugo Chávez. También sale a relucir la íntima –seguramente jugosamente pagada- relación y consultoria del dirigente del PSOE y ex Presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, frecuente defensor de Chávez y Maduro, el sorpresivo y no anunciado viaje de la Vicepresidente de Venezuela con las cuarenta maletas que dejó en Madrid cuando tenía –y tiene- prohibición terminante de la Unión Europea de pisar suelo europeo, aterrizaje madrugador cuando fue recibida por un Ministro activo del Gabinete de Pedro Sánchez especialmente enviado al aeropuerto de Madrid.

Y eso para no hablar de la presencia y contratos bien pagados de dirigentes del partido extremista Unidas Podemos en la Venezuela, aliado con el PSOE de Pedro Sánchez, y el gobierno chavista, y la actitud indecisa entre el rechazo y la comprensión del actual Gobierno de Pedro Sánchez con el acusado y muy señalado régimen de Nicolás Maduro.

Experto y muchos años jefe de inteligencia del chavismo, de esos temas y muchos más el general Hugo Carvajal aparenta saber mucho, tras la sospechosa desaparición en las narices de la policía española que ahora, despertando de una incompetencia sobre la cual la pellizcó la DEA, súbitamente lo descubrió y lo arrestó de nuevo.

Cumplidos la detección y el arresto, veinticuatro horas después tres magistrados de la Audiencia Nacional se interesan en el asunto y frenan la extradición de Carvajal a Estados Unidos alegando que las cosas no están claras y quieren hacer verificaciones.

Claro que lo no claro es la larga permanencia, la fuga, la escondida y la súbita detención de Hugo Carvajal en esta España que parece no decidirse a favor o en contra del régimen castromadurista. Y en Estados Unidos, la justicia espera.