Se necesitan más líderes democráticos en Venezuela
Según la página WEB titulada “Definición”, las características de un líder, se definen así: Cito SIC: Líder, del inglés leader, es una persona que actúa como guía o jefe de un grupo. Para que su liderazgo sea efectivo, el resto de los integrantes debe reconocer sus capacidades. Por ejemplo: “Necesito un líder dentro de este equipo”, “Todos pusimos de nuestra parte para ganar, pero tenemos que reconocer que no lo habríamos conseguido sin nuestro líder”.
El líder tiene la facultad de influir en otros sujetos. Su conducta o sus palabras logran incentivar a los miembros de un grupo para que trabajen en conjunto por un objetivo común. De acuerdo a su forma de ejercer la conducción del equipo, el líder puede ser considerado autoritario (toma las decisiones sin dar explicaciones al respecto), democrático (permite que todos opinen y decide por consenso) o laissez faire (es el líder liberal, aquél con una conducta pasiva que delega el poder en los demás).
Otra clasificación de los líderes se realiza según la influencia que tienen sobre sus subordinados: el líder carismático llega a modificar los valores, las creencias y las actitudes de sus seguidores (figuras históricas como Adolf Hitler o Juan Domingo Perón están consideradas dentro de este grupo); el líder transaccional, en cambio, se limita a aportar los recursos que considera válidos para el grupo.
Cabe mencionar que no puede nacer y florecer un grupo de seres humanos en el que nadie asuma el rol de líder, por sutil que sea su desempeño. Todas las personas necesitan de un cierto grado de organización en su vida, y para ello es esencial que exista un guía, alguien que tome o evalúe las decisiones importantes y que mantenga a sus compañeros animados y enfocados en un objetivo, para que no se pierda el sentido de la unión. Desde un pequeño grupo de amigos hasta un país entero, todos se basan en un sistema jerárquico y, aunque a simple vista puedan parecer ejemplos dispares, en ambos casos el papel de líder es más difícil de mantener que de alcanzar.
Algunas de las características más importantes de todo líder exitoso son: que sabe escuchar a los demás integrantes de su grupo; que se acerca a cada uno de ellos y se toma el tiempo de conocerlos bien, prestando especial atención a sus necesidades; que no se muestra como un amo todopoderoso, sino que intenta dar un espacio a cada uno, para que todos sientan que forman parte de las decisiones; que sabe aprender de sus errores y que no tiene miedo al cambio, dado que en éste reside el secreto de su continuidad en el rol.
La metodología de elección del guía puede dar lugar a líderes formales (que son elegidos por una organización) o líderes informales (emergen del propio grupo). Un ejemplo de líder formal es el capitán de un equipo de fútbol elegido tras una votación en la que participan todos sus compañeros. Un líder informal, en cambio, podría ser aquel estudiante que, en un grupo de estudio, impulsa las acciones de manera espontánea.
En el ámbito del desarrollo de software existe un puesto laboral denominado Lead Programmer, que significa Programador líder y se utiliza en inglés aun en países de habla hispana. Quien asume este rol debe tener a su cargo uno o más equipos de programadores, y entre sus posibles obligaciones se encuentra la supervisión del trabajo realizado por los demás, dando consejos y ofreciendo su ayuda para resolver cualquier problema que pueda surgir a lo largo de la vida de cada proyecto. Cabe mencionar que no siempre cumple la función de programador propiamente dicha, sino que muchas veces utiliza sus conocimientos y su experiencia para alcanzar con éxito los objetivos propuestos por sus superiores. Fin de la cita.
Es una definición muy completa que nos orienta conocer más allá de nuestros propios conocimientos, sobre el tema. Por supuesto, existe muchísima lectura sobre la materia. Algunas personas con características natas de líder, desconocen su potencial de liderazgo, bien por falta de conocimientos, o por su humildad, ya que sus actuaciones las hace tan naturalmente, en forma desinteresada, que esa habilidad pasa desapercibida y no trasciende. Simplemente, es un prospecto de líder. Las personas que tienen y conocen esas habilidades de líder, por lo general actúan espontáneamente, según las situaciones importantes que se les presenten en la vida.
En Venezuela, tenemos una terrible situación, económica, social, delincuencial y moral, causada por el gobierno actual, el cual se declaró marxista leninista, luego de las elecciones democráticos que; lo eligieron en 1998. El gobierno, con 18 años en el poder, ha intentado de todas las formas posibles, materializar el propósito de convertir a Venezuela en una dictadura comunista, lo cual ha logrado en parte. Un 80% del país, ha planteado un referendo revocatorio al gobierno actual, en la persona del presidente Nicolás Maduro, presidente de la república; por negligencia manifiesta y violación a la constitución de Venezuela y de sus deberes. Mediante argucias y manipulaciones del CNE y del TSJ, y complicidad con las FANB, se niega a realizar tal referendo, que permita a los venezolanos cambiar al gobierno, a quien se le vence el periodo presidencia en el año 2018.
Terminamos el 2016, con las elecciones a gobernadores y alcaldes diferidas, por miedo del gobierno a perderlas. Se suspendió la realización del RR usando artimañas absurdas, por miedo a perderlo. Iniciamos el año 2017, con una situación muy tensa, complicada e inédita, donde el gobierno ha amenazado a la oposición, con disolver a la Asamblea Nacional (con mayoría opositora), Una acción de esa magnitud, sería simplemente un golpe de Estado y declaración manifiesta de Dictadura formal, la cual bajo ninguna circunstancia el pueblo de Venezuela está decidido a no permitirla. Es decir, ante esta nueva situación, la forma de lucha de la oposición tendrá obligatoriamente que cambiar.
Tal situación obliga a La mesa de la Unidad Democrática (MUD) a reorganizarse y fortalecerse, para reiniciar otro tipo de lucha. Por experiencia propia, sabemos que las primeras acciones de una dictadura declarada como tal, son las encarcelar a los líderes de la oposición, que en Venezuela son una gran cantidad. Los controles se endurecerían, los medios de comunicación serían censurados más reciamente. Las reuniones en grupo serían prohibidas. La propiedad privada sería eliminada y cambiada a propiedad del estado, o comunal. El internet será limitado o eliminado para ciertos sectores. Los bancos privados serían expropiados. Posiblemente expropien las pocas empresas privadas que aún existan. Las manifestaciones serían impedidas con extrema violencia.
Ante posibilidad del establecimiento de una dictadura comunista, como sería la de esperar, es la razón por la que se necesitarían líderes y liderazgos políticos, que reemplacen a los ya existentes, cuya posibilidad de que los encarcelen o envíen al exilio, son probables. Se necesitan líderes que defiendan a Venezuela de la dictadura del comunismo y de cualquier otra índole. Se entiende, que eso no es tan fácil como soplar y hacer botellas; pero es esencial para la defensa de la patria, que eso suceda.
La oposición ha estado luchando por reestablecer la democracia en Venezuela desde el inicio de este gobierno. Se ha intentado, mediante el voto en elecciones limpias y pacíficas. Hasta diciembre del 6D, cuando la Asamblea Nacional fue ganada abiertamente por la oposición, sólidamente unida; el gobierno permitió todo tipo de lecciones, donde el abuso de poder predominó. Dado que, con este triunfo, la oposición tiene un aliado de la democracia y los valores que ésta representa, el gobierno cambió su manera de actuar. Esto nos obliga a cambiar nuestra estrategia, para enfrentarlo.
Para los demócratas opositores que tienen vivir dentro de una dictadura comunista, militar o de cualquier otro tipo, significa, que debemos aprender a vivir en la clandestinidad o en el exilio. Debemos mentalizarnos para eso. Cuando viví la dictadura militar de Marcos Pérez Jiménez, era un joven estudiante sin grandes problemas, puesto que había comida, seguridad, progreso económico, el bolívar era una moneda fuerte, cada año se inauguraba una gran obra, se estaban eliminando los ranchos en Caracas, la seguridad ciudadana en las calles era óptima. Mucha gente estaba feliz. Otros eran perseguidos, torturados y desaparecidos. Sin embargo, era una dictadura, donde se añoraba la libertad, por sobre todas las cosas. El liderazgo político clandestino en el país era de primera y muy valiente. Fueron varios los líderes de Acción Democrática, del Comunismo, de URD, y de Copei: que entregaron sus vidas por la causa de la democracia.
Ante la posibilidad de una dictadura comunista, parecida a la cubana, en comparación a la de Marcos Pérez Jiménez, la preparación de la oposición debe ser mucho más rigurosa y exigente para enfrentarla. En esta ocasión, a las libertades que añorábamos en el anterior régimen o dictadura militar, debemos agregarle: la falta de: comida, las colas para adquirirla, la inseguridad personal, la falta medicinas y de salud, la falta de liquidez, la corrupción galopante, del control cambiario, de la irracionalidad del presidente, del deterioro de la altamente deteriorada infraestructura física del país, de la devaluación, de la destrucción de PDVSA, y de servicios básicos.
Es decir, habría muchos más argumentos del pueblo, para luchar con una dictadura comunista, como la que pudiéramos tener con Nicolás Maduro y sus fanáticos dementes y descontrolados. Se necesitaría de una morbosidad sin límites y un despego absoluto de la patria, la familia, la moral y la sensatez, para no luchar contra ese proyecto político desquiciado que nos pretenden imponer por la fuerza de las armas. Cuando el pueblo despierte y entienda a cabalidad, lo que está en juego, y el sufrimiento extra al que se expone, por no luchar contra esta tiranía, entenderá por qué la oposición no le dará tregua al gobierno para que nos oprima como pretende hacerlo.
En esta oportunidad en que se necesitan líderes políticos de envergadura dispuestos a luchar y a vencer a la maldad, la injusticia, y la corrupción. Debemos reflexionar sobre el lado del cual nos colocamos. Es incomprensible que un venezolano como el músico Gustavo Dudamel, declare lo siguiente: «No quiero tomar ninguna posición sobre la situación de mi país». Qué pobre diablo es ese personaje. Supongo que con tantos viajes que realiza, no tiene tiempo de leer las noticias. Me pregunto: ¿Es que necesita de la colaboración económica del gobierno para sobrevivir?
Venezuela es un país de líderes y de liderazgos. Lo hemos demostrado en infinidad de oportunidades. Un líder político debe creer en la democracia y defenderla del totalitarismo. En el comunismo no existen líderes políticos puesto que no aceptan la pluralidad de ideas. Tampoco creen en las lecciones libres y trasparentes, puesto que las decisiones las toma un grupo autoritario de adoctrinados. ¿Siendo la democracia el mejor sistema de gobierno que existe en el mundo, que nos puede hacer pensar que el sistema comunista es mejor que el sistema de gobierno democrático?
Los nuevos líderes políticos de la nueva Venezuela, deben ser demócratas, que defiendan: el Estado de derecho, la pluralidad de ideas, las libertades individuales, los derechos humanos, la libertad de expresión, la propiedad privada, el derecho a elegir mediante el voto, la justicia ciega, la ética, etc. Por sobre todas las cosas un líder democrático, cree en la constitución y la respeta. Bienvenidos los nuevos líderes políticos venezolanos, que engrosarán las filas de la democracia.