¿Y la de los presos políticos que?
Imagino que el tirano de Miraflores pasará unas navidades “muy lindas”, aunque no logre deshacerse de la úlcera gástrica que le produce su constante miedo y su paranoica idea de persecución.
Supongo que sus seguidores le habrán decorado un hermoso árbol, con costosos adornos comprados en el Imperio. Los regalos de los chicos: Rosa Inés con muchas barbies y un muñeco chino con la cara de papá. Los muchachos más grandes se les resolverá con cheques, en la cochina moneda del capitalismo salvaje.
En esa “paz y armonía familiar del tirano” seguramente habrá tiempo para pensar en los venezolanos, en especial, en aquellos que han disentido del régimen, en los que no comparten la política revolucionaria ,ni los verdaderos objetivos del proceso.
Podrá el Comandante de Sabaneta, reflexionar sobre algo diferente a su poder absoluto, a sus jugosas cuentas bancarias y su egocéntrica existencia. Me pregunto, ¿cómo pasarán estas fechas decembrinas los familiares de los muertos y desaparecidos del régimen?. ¿Cómo se sentirán los hijos y familias de los presos políticos del gobierno revolucionario?. ¿Habrá árbol y momentos felices para los civiles y militares que permanecen detrás de las rejas por disentir de un régimen militar autoritario?.
En estos momentos, en los que la mayoría de los venezolanos se encuentra preparando sus hallacas, y pensando en que traje lucirán el 31 de diciembre, los familiares de los presos solo son capaces de luchar por no perder la esperanza de ver cuándo lograrán la libertad sus seres queridos.
¿ Cómo estará la familia y amigos de Keyla, la niña asesinada por las fuerzas del régimen, y de todos aquellos que han muerto en la lucha por la restauración de la democracia en Venezuela?.
Sería bueno que en nuestras agitadas agendas de finales de año de 2005, reflexionáramos sobre lo que estamos viviendo como país y como sociedad. A lo largo de la historia, habíamos visto como los gobernantes autoritarios y tiranos privaban de su libertad a los opositores. Cuando no, los asaltaban con la muerte o los enviaban al exilio. Pero ahora, todo ocurre frente a nuestras propias narices, sin que ello produzca ningún tipo de perturbación en la gente. ¿Qué nos esta pasando? ¿Acaso estamos dando algún tipo de apoyo con el silencio? Son pocos los que hablan, pero peor aun, son menos los que escuchan o desean estar enterados de lo que esta ocurriendo.
Mientras, Chávez y la nueva elite corrupta se preparan para pasar unas ricas e impunes navidades y las más despilfarradoras fiestas de año nuevo, los venezolanos que pelearon y se enfrentaron al régimen lucen olvidados, no solo por el gobierno, sino por muchos de la sociedad civil que con la intención de negarse u obviar la realidad, ensayan vivir desenchufados de lo que ocurre día a día.
No se puede tapar el sol con un dedo. No puede pretenderse edificar una realidad paralela a la que estamos viviendo como nación. En la Venezuela de Hugo Chávez SI HAY PRESOS POLÍTICOS y sí se ha incrementado la violación de los derechos humanos, tal como lo confirman los Informes de los Organismos internacionales, y muy a pesar de las mentiras de German Mundarain, quien con grosero desparpajo asegura que en Venezuela ha habido un avance en materia de derechos humanos, justo en la víspera que el TSJ dictara condena por mas de 15 años a Carlos Ortega, de una manera injusta y arbitraria.
Que vergüenza, que el régimen, además de negarse a trabajar por el bien común, se dedique a burlarse de la gente y de los preceptos constitucionales.
Solo un buen gobernante otorga amnistía en esta época del año, Hugo Chávez es un tirano y jamás consideraría tal beneficio de Estado. Eso esta claro y no creo que a alguien se le ocurra considerar esa posibilidad. Pero qué pasa con la gente, no podemos darnos el lujo de eludir, de “hacernos los locos”. Hay gente en la cárcel, privada de su libertad injusta y arbitrariamente.
Justo en Navidad, cuando los mejores sentimientos llegan a nuestros corazones, no deberíamos de dejar de lado a nuestros compatriotas que sufren más que nosotros por pensar diferente y que sienten, más directamente que la mayoría de nosotros, el peso del autoritarismo inclemente del régimen chavista.
Desde este foro, les hacemos llegar un mensaje de profunda solidaridad a los amigos que se encuentran en las cárceles de la revolución, y les recordamos que sin justicia no hay paz, ni tranquilidad. Somos muchos los venezolanos que seguimos en pie de lucha y estamos dispuestos a seguir trabajando por recuperar la democracia y la libertad. El 2006 será un nuevo reto para la Venezuela decente que no los abandonara en estas horas de aciago.