Opinión Nacional

Video Veraz

Por más que los chavistas trataron de impedir que el pueblo venezolano observase en las pantallas de sus televisores la masiva marcha que el 23 de enero de 2002 organizaron todos los sectores sociales y políticos que se oponen al totalitario régimen socialista de Hugo Chávez Frías, la irredenta naturaleza se impuso por encima del anti-natural deseo gubernamental de coartar la libertad de información. ¿Enviarán ahora Freddy Bernal, Cilia Flores y Nicolás Maduro, a sus turbas stalinistas al Palacio de Miraflores para que le griten al talibán de Sabaneta y a sus asesores marxistas… ¡Digan la Verdad! como lo hicieron hace poco ante las puertas de El Nacional?

Porque el innegable hecho de que la marcha chavista fue una minúscula concentración en comparación con la de la oposición, no es la única verdad que intentó ocultar el gobierno al prohibir los vuelos sobre Caracas el día de la marcha, sino que el video filmado por funcionarios de la Disip, muestra en todas sus magnitudes, muchas otras verdades no tan fácilmente evidentes; como por ejemplo:

Qué Adam Smith tiene razón, y nó Carlos Marx

La única razón por la cual los venezolanos pudimos tener acceso al video aéreo de las marchas del 23 de enero, es la que descubrió y luego nos enseñó, el economista escocés Adam Smith a través de su famoso libro An Inquiry into the Nature and Causes of the Wealth of Nations (Una Investigación sobre la Naturaleza y Causas de la Riqueza de las Naciones, 1776): lo que mueve al hombre, es el egoísmo y el afán de lucro.

Porque, desde que Jesús Urdaneta Hernández -el primer director de la Disip nombrado por Chávez- comenzó a «depurar» a la policía política venezolana en 1999, y después de las otras dos «re-depuraciones» que ha sufrido esa institución bajo la jefaturas de Eliécer Otaiza y de su actual director, Carlos Aguilera; es prácticamente imposible que quede allí algún funcionario no-chavista; y en consecuencia, quienes le vendieron la copia del video a los periodistas fueron disips revolucionarios.

¿Porqué lo hicieron? ¿Débiles convicciones revolucionarias? ¿Porque allaaaaaá… muy allaaaaaá en el fondo aún conservaban convicciones democráticas? ¡Qué vá!… por el cochino dinero… por pensar -sólo en ellos- antes que nada y antes que nadie…

La ley de la oferta y de la demanda -la llaman-. Sólo tenemos que imaginarnos a los funcionarios de la policía política siendo acosados a toda hora y en todo lugar -así como sus familiares, amigos y relacionados- por un enjambre de periodistas overt and undercover, para que le consiguiesen una copia del video aéreo de la marcha.

Debe haber ganado el mejor postor -como reza la implacable ley NATURAL de la oferta y la demanda- y cuando las cifras ofertadas in crescendo, llegaron al «precio correcto», no hay duda -a juzgar por el resultado- que deben haberse derrumbado estrepitosamente, todos los «principios morales» y los rudos entrenamientos de contra-inteligencia que debe haberles inculcado el chavismo, ante el acoso de la otra ley NATURAL: la del egoísmo y el afán de lucro. Ley, que como nos enseño Adam Smith; tenemos incorporados a nuestros genes, todos los homo sapiens, desde el mismo momento de nuestro nacimiento -seamos, después, revolucionarios o nó-.

Se rumora, que cada copia del video, la vendieron por 200 mil bolívares.

Otra verdad que subliminalmente muestra el video veraz:

Que la corrupción administrativa es el principal byproduct del socialismo

Este episodio: vender «al enemigo», por 30 dinares; ¡perdón! por 200 mil bolos (¡cómo ha subido la inflación estos últimos 2000 años!), un enorme cuchillo para su propia garganta (el video aéreo de la marcha) y precisamente en este tan crítico momento político, cuando el chavismo patalea rabiosamente por su supervivencia; es la más contundente prueba, de que existe una proporción directa entre el tamaño del Estado y la corrupción; es decir, mientras más grande, mientras más ámbitos privados estén en manos del Estado, mayor será la corrupción administrativa -y viceversa-.

¿Entenderán ahora los chavistas porqué todas las recetas para construír una economía nacional sana incluyen una buena dosis de privatizaciones de empresas estatales?. ¿Entenderán ahora el porqué las ideas de separación del poder público en tres ramas distintas, autónomas, e igual de poderosas, de Charles Louis de Secondat, le baron de la Brède et de Montesquieu, mejor conocido como, Montesquieu -a secas-, han sobrevivido tantos años y su popularidad continúa creciendo aún después de más de 250 años? (publicó su libro «El Espíritu de las Leyes» en 1750).

Si no lo entienden, -por favor chavistas- cierren sus ojos, e imagínense por un momento la cifra actual de funcionarios públicos que tiene entre sus facultades la discrecionalidad de otorgar permisos, licencias, autorizaciones, imponer multas, abrir o cerrar averiguaciones, decretar subsidios, otorgar préstamos, créditos y ayudas financieras; en fin, toda esa larga lista de alcabalas burocráticas creadas por la «IV y V» repúblicas.

Después de tomar un receso, abrir los ojos por un rato, ir al baño o tomarse un refresco o un café; vuelvan a cerrar los ojos e imagínense la cifra de NUEVAS alcabalas burocráticas que crean los 49 decretos-ley promulgados gracias a la Ley Habilitante -como por ejemplo- las que administrará Adán Chávez Frías amparándose en la Ley de Tierras.

Y, finalmente, imagínense chavistas, a los enjambres de empresarios -nacionales e internacionales- instituciones -públicas y privadas- y personas particulares, que se acercarán a los burócratas que poseen el discrecional poder para decidir sobre sus vidas y sus propiedades, ofreciéndoles todo tipo de goodies (dinero, sexo, viajes, propiedades) -o presionándolos con chantajes políticos, económcos, sexuales; o puras y simples amenazas terroristas- para que se «hagan de la vista gorda», o burdamente les vendan o regalen el papelito sellado y firmado que les permitirá continuar con sus NATURALES actividades y vidas… ¿Capicì adesso?. Pues entonces, comprendan también, chavistas, que por simple deducción, minimizar al Estado y minimizar la discrecionalidad de los burócratas, también minimizaría -enormemente- la corrupción.

Esto ya lo sabía todo el mundo. Simplemente preguntémosnos: ¿De dónde salió la temible Mafia Rusa «tan de boga» en estos días? ¿Brotó de repente cuando renunció Mijail Gorbachov a la presidencia de la URSS? ¿No eran todos los rusos unos «angelitos» a quienes «papá Estado» les daba el biberón todos los días? ¿O será simplemente -que al desplomarse el estado soviético- los funcionarios públicos y los empresarios -también públicos, porque en la URSS no existía la propiedad privada- curtidos por 74 años contínuos de corrupción administrativa, simplemente «privatizaron» sus actividades cuando el Estado (el ente con el que hacían todos sus turbios negocios) dejó de existir?

Otra más de las verdades subliminales del aéreo-video:

Qué en los regímenes socialistas, las constituciones y leyes, son sólo para el proletariat
¿Cuántas veces ha extraído Chávez, de uno de sus bolsillos, -en público- un pequeño librito azul que llama «la bicha» exigiéndonos a todos los venezolanos estudiar la Constitución y cumplir y hacer cumplir su articulado?.

¿Entonces porqué demonios llamó Chávez «tumor» a la Iglesia Católica, si el artículo 57 de esa «bicha» dice que no se permiten los mensajes que promuevan la intolerancia religiosa?.

¿Porqué demonios entonces le impidió Chávez a los funcioanrios de la Disip, entregarle voluntariamente a las televisoras el video de las marchas del 23 de enero y los ha sometido a investigación -y a una posible destitución- si ése mismo artículo 57 de la Constitución establece que se prohíbe la censura a los funcionarios públicos para dar cuenta de los asuntos bajo sus responsabilidades?.

Enumerar aquí la enorme cantidad de veces que el gobierno socialista de Hugo Chávez Frías ha violado la Constitución y numerosas leyes de la República, no es necesario.

Una sóla violación a la Constitución. SON DEMASIADAS VIOLACIONES A LA CONSTITUCION.

Sin embargo, nos vemos obligados a citar -en virtud del título de este escrito-, el artículo 58 de la tantas veces ya mencionada Constitución que en uno de sus párrafos dice: «Toda persona tiene derecho a la información oportuna (inmediatamente al terminar las marchas), veraz (sin que los videos sean editados) e imparcial (mostar las dos marchas en el video)….».

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