Totalitarismo
Totalitarismo. Tema trillado, pero actual, por ahora, y “en pleno desarrollo” en Venezuela y en Bolivia, teledirigidos desde la isla caribeña del terror y el genocidio en coordinación con el terrorismo internacional. Sin dudas.
Para Carl Friedrich, el término “totalitarismo” abarca experiencias no solo de “las derechas”, sino también de “las izquierdas”. Aquí recordamos similitudes entre el régimen soviético estalinista y las dictaduras fascistas y, de nuevo, más elementos en común entre ellos, de las cuales los autores Carl J. Friedrich y Zbigniew Brzezinski citan:
1. Una ideología oficial que cubre todos los aspectos de la vida humana; (tal como esta en proceso en Venezuela, ahora)
2. Un sistema de partido único encabezado por un dictador; (tal como lo estamos viendo todos los días en la asamblea nacional)
3. Un sistema de control ciudadano de corte policíaco; (tal como lo estamos padeciendo todos, los delincuentes en la calle y “acabando” con la población inerme y con supuesto beneplácito de los gobernantes de turno)
4. Concentración de todo el poder publicitario; (tal como estamos observando, la claudicación de medios, la “toma” y “cierre” de algunos, la expansión de medios en manos del gobierno a todo lo ancho y largo del país mas los actos de amedrentamiento no comprobables todos, el chantaje y el billete de por medio, el delito de opinión, los periodistas presos, etc.)
5. Concentración de todos los medios militares; (tal como hemos visto y oído por los medios de comunicación)
6. Control central y dirección de toda la economía. (No solo con la “eliminación progresiva y consistente de la propiedad privada”, toma de tierras y empresas, sino con los nuevos guetos, el control de cambios, subsidios, fijación de precios, etc., ingresos petroleros y gastos sin control ni rendimiento de cuentas)
Sin embargo hacemos la salvedad de que, en la práctica, las experiencias totalitarias presentan diferencias entre ellas.
Veamos algunas definiciones de totalitarismo: una, la dada por los politólogos americanos Friedrich y Brzezinski: “dominación de un partido de masas dirigido por un líder carismático, una ideología oficial, el monopolio de los medios de comunicación de masas, el monopolio de las fuerzas armadas, un control policial terrorista, un control centralizado de la economía”; otra, la de Víctor Serge, que se remonta al fenómeno del totalitarismo que cristalizó entre 1927 y 1930, sobre todo en Europa, lo definió como:
– un Estado dirigido por la policía secreta y basada en los campos de concentración, llenos de deportados y condenados sin juicio; (este es un estado dirigido por militares y los campos de concentración modernos son las listas tascon, maisanta, los guetos, las misiones, etc., las cárceles, los periodistas y disidentes presos, menos los delincuentes, las persecuciones conocidas, los que se han marchado ya, los asilados, y las amenaza permanentes, etc.)
– un régimen de partido único; (solo hay que ver y oír la asamblea nacional)
– la ausencia de “libertades democráticas elementales”: prensa, opinión; la ausencia de elecciones libres y del voto secreto. (Ya es suficientemente conocido todo lo relacionado con los procesos electorales).
¿Aquí, ahora, el socialismo del siglo XXI invento una nueva definición de totalitarismo? ¿Acaso tenemos los venezolanos mentalidad totalitaria y no nos habíamos dado cuenta de eso? ¿Acaso no hemos comprendido cuanto paso en Perú y ahora en México? ¿Es el pueblo quien vota y elige o son los cogollos? ¿Qué pasa con la pluralidad? ¿Aquí no funciona? ¿O alguien muy poderoso esta manejando la unanimidad para confundir? ¿Por qué las y los supuestos líderes no convocan para reaccionar contra el totalitarismo en marcha? ¿Por qué están como postrados y embarcados en el burocratismo gubernamental totalitario si hay que preservar primero la libertad, la justicia, la elección conjuntamente con la votación, la democracia? ¿Por qué? ¿Muchos dólares en circulación? Total: “no lloremos mañana cuanto no supimos defender ahora, hoy”. El tiempo es propicio y las oportunidades también.
