Todos los caminos y todos los medios son válidos
El régimen y la fuerza armada declarada socialista, anti imperialista y chavista, se han puesto abierta y definitivamente al margen de la Constitución. Los militares, como en tiempos que ingenuamente creímos alguna vez superados, se ponen a la cabeza de un golpe de estado sustituyendo el imperio de la constitución y las leyes con el imperio de la fuerza bruta de las armas y la arrolladora fuerza de la corrupción y el dinero fácil.
Sin entrar en disquisiciones de naturaleza jurídica, que no hacen falta muchas, el hilo constitucional hace años que fue roto por Hugo Chávez y quienes fueron sus cómplices desde el mundo civil cuando le abrieron las puertas al desconocimiento grosero de la entonces vigente Constitución de 1961. Los adulantes de oficio hicieron causa común con el tropero patán después de que en su toma de posesión declaró a la constitución “moribunda”.
Desde entonces, a mi juicio, no hay Estado de derecho en Venezuela y el hilo constitucional no solamente fue roto cuando se convocó la asamblea constituyente, sino que desde entonces nunca ha sido restablecido.
Las imágenes de hoy en Los Próceres son vergonzantes para Venezuela. Un payaso disfrazado de militar hablando en nombre de una banda armada que opera al margen de la constitución y las leyes: la FANB y un títere ilegítimo en su origen y en su desempeño, que no solamente declaran a esa banda delictiva como brazo armado de una fuerza política sino que tienen los riñones, para no usar otra expresión más apropiada, de pretender hacer de Hugo Chávez el “nuevo libertador”, porque supuestamente nos ha dado la “verdadera independencia”. El acto en su conjunto y en cada uno de sus detalles es propio de una inculta y primitiva “república bananera”: imágenes del afortunadamente fallecido Hugo Chávez; el himno nacional en la voz del muerto que “vive”; el Ilegítimo moqueando al oír la voz de ultratumba; la cantidad de chapitas y guilindrajos en las guerreras de quienes nunca han enfrentado a un enemigo armado, cuyas acciones más arrojadas han sido echarle “gas del bueno” y perdigonazos a los estudiantes universitarios y a las protestas ciudadanas. Todo amenizado por una voz engolada que recita ridículas frases para exaltar a Chávez, para relatar supuestas glorias y epopeyas militares pasadas y recientes que más que historia son el producto de las mentes afiebradas, generalmente bien pagadas, de algunos profesionales de las loas y el criollísimo jalabolismo.
La impudicia con que actúa el régimen y en particular la banda delictiva que se autocalifica de FANB, socialista y chavista, nos obliga a los venezolanos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para expulsarlos del poder que hoy usurpan. No hay limitación alguna en los medios a utilizar para ese fin. Estamos frente a un régimen despótico que, públicamente y sin sonrojo alguno, viola la constitución y las leyes en lo que constituye no solamente una ofensa sino un reto a todos los venezolanos: LO HACEMOS ¿Y QUÉ? Cada vez que uno de estos mofletudos payasos disfrazados de militares y fusil en mano, con el gesto del delincuente que se siente “guapo y apoyao”, declara en cadena nacional y frente al mundo entero, su compromiso político con el Comediante Eterno y Supremo, con el socialismo y con el chavismo, nos está lanzando un reto a los venezolanos cuyo guante debemos recoger sin vacilación alguna y organizarnos para derrotarlos para siempre.
La justificación constitucional a la libre elección de cada uno está en las siguientes normas:
Para quienes pensamos que la asamblea constituyente de 1999 fue convocada en violación de la Constitución de 1961:
Art. 250. Esta Constitución no perderá su vigencia si dejare de observarse por acto de fuerza o fuere derogada por cualquier otro medio distinto del que ella misma dispone. En tal eventualidad, todo ciudadano, investido o no de autoridad, tendrá el deber de colaborar en el restablecimiento de su efectiva vigencia. [Constitución de la República de Venezuela 1961]
Para quienes creen que no fue convocada en violación de la Constitución de 1961:
Artículo 333. Esta Constitución no perderá su vigencia si dejare de observarse por acto de fuerza o porque fuere derogada por cualquier otro medio distinto al previsto en ella.
En tal eventualidad, todo ciudadano investido o ciudadana investida o no de autoridad, tendrá el deber de colaborar en el restablecimiento de su efectiva vigencia. [Constitución de la República Bolivariana de Venezuela 1999]
Todos los caminos y todos los medios, sin excepción, son válidos para restablecer la vigencia de la Constitución.
@jchaffardet
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