¿Tienen buenas intenciones los revolucionarios?
Muchos de ellos sí, sobre todo los jóvenes, yo la tuve cuando viví esa etapa. También creo que cuando se vive ese “sarampión” casi no se escucha consejos, porque uno se considera como un bendito en la historia, un vengador, una especie de salvador que con ayuda de los demás camaradas va a terminar con la explotación y con las injusticias; aún así, y conciente de ello, trataré de transmitir de manera sencilla, mi humilde reflexión…Partiré del plan socialista. Para quien no lo sepa, en el país existe un plan socialista y se llama Proyecto Nacional Simón Bolívar 2007-2013, que están tratando de aplicarlo a troche y moche. Dado que sus medidas y consecuencias las sentiremos todos, creo que vale la pena dedicar un tiempito a conocer la filosofía-ideología que le sirve de inspiración y compararla con otras existentes…La ideología socialista. Es una de las tres grandes ideologías político-económicas del mundo actual (Capitalismo, Socialismo y Socialdemocracia). Cada una tiene su lógica. La del Capitalismo se rige por la demanda, los precios y los beneficios; la del Socialismo se rige por la propiedad estatal y la planificación administrativa centralizada; mientras que la Socialdemocracia es una especie de ideología mixta mediante la cual se intenta mejorar al Capitalismo injertándole elementos tomados del Socialismo…Condiciones para el funcionamiento. El Capitalismo requiere que los agentes productivos sean libres e independientes y que la propiedad sobre los medios de producción sea privada; el Socialismo parte de considerar injusta la distribución de la riqueza que se produce bajo esas relaciones sociales de producción y supone que en la propiedad privada está la raíz de esa injusticia y por eso busca suprimirla conjuntamente con el sistema de precios; mientras que la Socialdemocracia busca corregir las desigualdades con leyes laborales, impuestos progresivos, programas públicos de educación y salud, bonos alimentarios y algunos subsidios…Las vivencias del Socialismo “real”. En todos los países donde ha existido o existe el Socialismo, se han dado cuestiones comunes, como lo son: la promesa de un Socialismo nuevo y humanista; las decisiones de producción planificadas centralmente; en todos se ha dado una especie de igualdad o nivelación por abajo; en todos ha existido escasez y racionamiento; en todos se ha dado persecución y represión política y una sobresaturación de propaganda; en todos ha prevalecido una especie de guerra latente y una militarización de la sociedad; y en todos se ha anquilosado una burocracia ineficiente que vive buscando “chivos expiatorios”… Burocracia perniciosa. En el Socialismo “real” la burocracia ha tratado de sustituir al mercado, y su destino siempre ha sido uno: el fracaso. Y la razón es muy sencilla, se fracasa porque no se puede producir ante una situación en la cual no existen incentivos suficientes, y por ello, decae la producción, los bienes escasean, se crean privilegios y florece la corrupción. Es lo que ha sucedido en la URSS, Alemania Oriental, Cuba, Albania, Polonia, Afganistán, Camboya, Corea del Norte, Vietnam, Mongolia…Una precisión final. Algunas personas dicen estar de acuerdo con el Socialismo de Chile o España. Les aclaro. Estos países no son socialistas, lo que sucede es que los partidos de sus presidentes actuales, son de siglas socialistas, pero sus respectivas constituciones nacionales no contemplan ser socialista y de hecho no lo son, y esa es la razón por la cual no están viviendo la experiencia traumática de los llamados países del Socialismo “real” ¿Lo debatimos?