Tiene piernas cortas…
Claro que las tiene cortas. Una mentira es siempre una mentira, con incapacidad funcional para caminar largo en el tiempo. El liderazgo verdadero, el que permanece y se renueva, sólo puede sostenerse cuando los lideres son genuinos, y demuestran con verdades su accionar y sus verdaderas intenciones. Un líder deja de serlo cuando requiere mentir de nuevo para tapar su anterior mentira. Piensa usted que los que lo escuchan y siguen son pendejos. Mala creencia esa.
Usted puede intentar engañar a alguien, usando una vibrante mentira. Lo puede hacer en múltiples oportunidades, pero llega un momento en que caemos en cuenta que nos engañan. Allí se acaba el juego. Cosa difícil es recuperar la confianza que se pierde cuando se miente y es descubierto.
Usted por ejemplo puede hablar de amor hacia el pueblo, de revolución de pobres, de defensa de los desposeídos, y simultáneamente, negar por diez veces que se discuta en la Asamblea acerca de la comida dañada. Usted dice defender al pueblo, cuando sus acciones dicen que defiende a ultranza al gobierno. Usted puede solicitar a sus gobernados que lleven una vida sencilla, sin lujos, pero no lo puede hacer al tiempo que exhibe signos desmesurados de lujo y riqueza, acompañados de actos repetidos de derroche. Termina preguntándose uno a que se refiere cuando da muestras de esa brutal incongruencia. Ley del embudo y yo siempre en la parte más estrecha.
Se cansará de hacernos creer que la cuarta republica no producía nada y por eso les arrebato las tierras y las fabricas, pero quedará al descubierto cuando nos damos cuenta que lo que arrebató produciendo ahora yace en el abandono. Somos inocentones y hasta a veces medio pendejos –movidos por la esperanza- pero tarde o temprano le vemos el bulto al mentiroso y las costuras al trapo rojo.
Este gobierno aprendió a mentir, con descaro, en asuntos en los cuales las pruebas están a la vista…me pregunto si también lo hace en asuntos donde no puedo comprobarlo. Nunca me había sentido tan idiota, como en los momentos en que el presidente me habla como si yo fuera un niño…con dificultades de comprensión y aprendizaje.
Los tocones que ahora usa este gobierno para caminar, gastados de tanto mentir, no lo van a llevar muy lejos. Lo más grave de la situación está por venir, pues cada día que pasa, desaparece algo de los estantes, pues este gobierno no tuvo la menor idea de cómo administrar los recursos que recibió en la última década. Si pensaba comerse una manzana o una pera -por ejemplo- grite duro para que le devuelvan su propiedad a Friosa, quien importaba esas “exóticas” frutas que ahora desaparecieron bajo los criterios “comunistoides” de estos mentirosos gobernantes.