Se cerrará el burdel del condominio
Cuando la incertidumbre atenaza en la paradójica expectación de desenlaces, donde unos esperan todo y otros nada; en esas horas fatídicas para la libertad de expresión e información, que muchísimos quisieran ver convertida en grandes jornadas de repulsa contra el proceso dictatorial que se afianza, no puede nadie que tenga un mínimo de responsabilidad en la formación de opinión, quedarse callado como si fuese de otros el problema.
De la ingenuidad a la provocación
Tampoco se puede frente a un requerimiento de respuesta precisa, sobre lo que hay que hacer frente o a lo que se armará el 27-28, respondiendo con una evasiva.
No sirve de nada mirar distraído hacia otro lado y contestar: Gracias No Fumo. No amigos: no se está invitando a fumar, se está invitando a pronunciarte sobre un hecho mayor… Ya por fin quedó definitivamente descartada la tontería, que se inventaron muchos, de que el régimen usaría sus propios chafarotes juristas para pedirle rectificaciones a Chávez sobre la medida de cierre a RCTV.
Definitivamente hay bolsas incurables, o enredados autonombrados líderes de opinión, que imploran que el gobierno detenga su marcha irrefrenable hacia la dictadura, soñando con una cohabitación, donde aun subsista un 1 % de separación de poderes. Los hay, en el colmo de la ingenuidad (¿acaso cobardía?) política, quienes creen que aun puede confiársele al gobierno organizar elecciones limpias.
¿Por qué se engañan a si mismos o pretender vivir de estas esperanzas de viejas solteronas, prendiendo velas a San Antonio, empedernidas en la eterna espera? El cierre de RCTV va y Chávez quisiera también, para esa misma fecha, un corte de muchas otras cosas. Es a lo segundo que debemos prestar atención.
Chávez es un militar, y por ello, concibe la política como estrategia bélica. No entenderlo así es tan ingenuo como esperar el Milagro de la resurrección de RCTV a manos del TSJ.
Chávez está cocinando la respuesta que espera dar, luego de ejecutada su provocación. Para ello, ha planeado un despliegue brutal de fuerzas policiales y militares, para desplegarlo desde el 26. Con ello pretenderá matar en el huevo cualquier repulsa popular contra el cierre.
Es un hecho que por cada volante que se saca desde sectores indignados con el gobierno y el cierre fascista de RCTV, la policía política y sus soplones sacan tres más para provocar intencionalmente una respuesta anticipada de la oposición, con la cual dar el pretexto para aplicar un nuevo 13 de abril, esta vez, sin el crucifijo en la mano.
El ciclo protesta –provocación –represión, definitivamente es irrenunciable para todo gobierno del planeta tierra y hasta nuevo criterio el chavista también está aquí.
Sin embargo es un juego peligrosísimo, porque se puede ir de las manos. La provocación de repente puede coger velocidad y ligado a la protesta, hacerse imparable. A veces resulta como querer apagar fuego con gasolina. Hay también muchas experiencias de ese tipo en la historia.
Aquí mismo, el mandamás admitió que el despidió a la directiva de PDVSA para provocar la ruptura y ello lo llevó, al 12 de abril de 2002, hasta La Orchila, donde todos pudimos verlo, apocado, casi enternecedor, lloroso, lavando sus propios interiores.
No debemos repetir la historia
En esta hora se impone tener nervios de acero. Si hay una conspiración militar recuerden que el gobierno tiene tres montadas para agarrar a los que le interesa matar. Si hay disturbios graves el gobierno mandará esbirros a muchos de esos focos, donde nadie puede distinguir el manifestante osado y patriota, del esbirro pagado para provocar y servir en bandeja de plata la justificación del despliegue policial-militar masivo, y el manotazo represivo.
El gobierno ya traspasó la línea dictatorial ante los ojos del mundo, y lo sabe. Por ello, le importa poco la hoja de parra democrática, caída hace rato ya. No le importará hacerse con muchos presos para exhibir autoridad y hasta algunos muertos para sembrar parálisis de voluntad por miedo. El problema es que si se generalizan los disturbios y desbordan a las fuerzas represivas, solo un aumento brutal de los muertos puede detener la oleada y es allí, donde una cadena de incidentes puede llevar a la anarquía de días y a su consecuente represión o hasta la caída del régimen.
El gobierno puede estar ya interesado en esa gran represión masiva, para posicionarse frente a una mayoría nacional que empieza a salirse de control, usando los espacios democráticos que aún quedan.
Nadie mas que yo celebraría que este gobierno fuese arrinconado e incluso desecho por una gran oleada de protestas, y que sus intentos de manipularlas a su servicio, con provocaciones y su represión, solo catapultará la fuerza del odio colectivo contra esta manga de delincuentes que nos gobiernan. Pero tengo el deber de decir que nada está claro, que de esas fechas muy próximas, donde tantos esperan grandes resultados, para salir de esta piltrafa de régimen lo mas probable es que no llenen ninguna buena expectativa, por una razón que generalmente se desconoce: no hay una organización ni menos una dirección que oriente el proceso. La última que se auto propuso y le dimos el beneficio de la duda desde el 3 D en la noche, le habla a un país distinto al nuestro. Los que pretenden hacerle sombra como relevo, no han reunido la credibilidad necesaria para erigirse en alternativa.
¿Puede estallar todo? Si, eventualmente si. Igualmente puede que NO PASE NADA.
Una cadena imprevista de sucesos, en una nación sometida por casi nueve años, a demagogos y abusadores del poder, pueden írseles las costuras y venirse abajo todo el tinglado del poder autoritario, e instalarse una situación de anarquía y vacío de poder, por uno o varios días.
El resultado final será que, SIN DIRECCION REAL de alternativa, será el poder del gobierno, con sus cuerpos represivos, quien tiene la primera opción de triunfo momentáneo, aunque quede la onda sísmica de efecto retardado demoledor. (remenber 27 F 1989).
Puede sobrevenir una enorme crisis militar, que ligada a este clima, desencadene la repulsa represada hace años de un cuerpo de oficiales obstinados de ser manipulados, o que quieran salvoconductos para salir de esta vía al infierno castrista como perspectiva.
¿La incapacidad del gobierno para manejar un cuadro de crisis aguda, puede terminar en una desbandada como la que ya vimos el 11 y 12 de abril?
Los chavistos fanfarronean con su 13 de reposiciones populares, cuando fue más que evidente, para quienes no son cretinos, que fue la FFAA quien les devolvió con lacito incluido el poder.
“Siempre habrá un trece” dicen. Y lo único seguro es que si se repitiera un 11 no habrá manera que sobrevenga otro 13.
Pero que nadie se engañe Aquí tampoco existe hasta la fecha de hoy condiciones para que estalle otro 11.
A diferencia de aquella gesta, a quienes hoy se les presenta como la dirección de la oposición, es casi tan despreciada como el propio gobierno, por la sencilla razón que la gran mayoría les asocia a la permanencia del Chávez en el poder. ESE HECHO es demasiado importante para obviarlo en la presente circunstancia. Hay que repetirlo: Hoy no tenemos una dirigencia opositora creíble y eficaz que pueda conducir el proceso de cambio.
Por supuesto, nada impide que aun con una limitada organización de la resistencia, como fue el caso del 23 de Enero de 1958, se derrumbe el edificio dictatorial, al estallarse sus propias bases de sustentación, y emerja una clara dirección popular en medio del colapso. Pero primero deberá admitirse que no estamos peleando con un gobierno de igual patente que Pérez Jiménez y que no existe, al propio tiempo, una dignidad y prestigio ganado en el martirio de una gran dirección clandestina como fue la de AD y PCV de entonces.
Solo tenemos parlanchines mediáticos empolvados y casi mimados por el régimen, como prospectos de una cohabitación que la inmensa mayoría rechazamos con asco.
Quien diga cómo resultarán las jornadas de los próximos días, es un simple charlatán. Aunque tenemos de todo en la oposición, hasta brujos que apostaban que el TSJ daría la salida honrada al gobierno para evitarse el disparate.
Quizás desconocían que el TSJ es parte del disparate y que todo gobierno condenado a desaparecer se hunde en medio de disparates.
El gobierno está como palo de gallinero, porque no sabe a que atenerse. Llegado aquí, a esta hora de tropelías, de ambiciones y codicias, que pudrieron hasta los tuétanos la llamada revolución bonita, hasta convertirla en este moridero de ilusiones y pestilente charco de corruptelas, nada puede esperarse sino sorpresas, o de inercias en medio del aún abundante gasto publico, que le aconseja total quietud a sus amplios beneficiarios de volátil lealtad, o una violenta irrupción de todos los excluidos de la lista Chávez, que suma los de la Tascón y todas las demás, del oprobio fascistoide de estos largos años.
Un golpe es posible, un contragolpe y autogolpe también. Una violencia sin límites puede desatarse y una expectante quietud de un domingo día de los muertos también.
Tronco de pronóstico podría decirme algún tomador de pelo y tendría que responderle ¿Y cual es el tuyo? Del cual lo más probable es que pueda burlarme dentro de pocos días.
Lo único que hace todo impredecible, paradójicamente, es la profunda debilidad del gobierno, pese a toda su aparente fortaleza, pero adversado por una oposición desordenada, con un liderazgo “autosuicidado” desde el 3D. Debilidad que el propio Chávez se ha encargado de hacer evidente, con su persistente referencia a un “golpe” la víspera del cierre de RCTV. Táctica que, por lo demás, muestra su afán de que “algo” suceda que le permita la coartada perfecta para atornillarse en el Poder, por tres años más.
Nadie puede alegrase que quienes hacia esa fecha levantaron de nuevo una gran fe popular, verles ahora agarrarse al cable de alta tensión de la cohabitación con el mandamás y achicharrarse. Ahora era su gran momento, pero ya no cuentan, quizás felizmente para los que queremos una solución de fondo, al terminar la pesadilla chavista.
Organizarnos es la clave
Tengo que insistir en que si bien es cierto este gobierno no se cae solo, y habrá que darle su empujoncito, ello no sucederá hasta que nos organicemos para que, llegado el momento, sepamos qué hacer con este país destruido que heredaremos. Porque recibiremos un país endeudado, con un bolívar sin valor, con la disciplina quebrada en todos los frentes, una FFAA destruida, con el hampa multitudinaria desbordada, al borde de la anarquía o la guerra civil.
Todo dependerá que entendamos, de una vez, que la solución positiva final, dependerá que nos demos los medios para construir rápidamente una dirección de prestigio, con solidez programática y una intransigente base principios, capaz de refundar el Estado desde las bases populares y de reparar los graves deterioros en el tejido social de la Nación.
Es una verdad descomunal que los acontecimientos para desatar su torbellino no esperarán a que esté construida esa nueva dirección que impulsaría un nuevo régimen político, pero lo único que puede tenerse por seguro, es que mientras no lo hagamos seguiremos dando tumbos. La regla que vale para un condominio, vale 27 millones de veces mas para este país.
Los escépticos dirán: pero es muy complicado designar una nueva directiva, entre tantos aspirantes y con tantos propietarios opinando. Y la respuesta es sencilla: NO ES complicado. No lo es, porque todos están de acuerdo, en que la actual junta directiva se robó todos los fondos, montó un burdel en la vigilancia y se rascan día y noche, hacen misas negras y quieren imponer que todos los inquilinos, vean un solo canal de TV del partido único mintiendo día y noche y que se uniformen de rojo y aplaudan al paso del mandamás y sus adulantes. Y creo que la gente no le va a gustar. Cuando los inquilinos echan chispas no hay junta directiva que aguante.