Para traer al 2008
He aquí la lista de todo lo bueno que quiero tener y mantener durante este año:
A la música, alimento del espíritu y lenguaje universal. A José Antonio Abreu, Gustavo Dudamel, María Guinand, Alberto Graü y a todos los integrantes del Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles, Schola Cantorum y coros afines. A las orquestas Sinfónica de Venezuela, Sinfónica Municipal, Gran Mariscal de Ayacucho y a las orquestas de todos los Estados de Venezuela, iconos de la Venezuela posible.
Al apoyo que da el Ministerio para la Cultura al Sistema de Orquestas.
A José Luis Pacheco y su gente del Teatro Teresa Carreño, por su labor constante de acercar la cultura al pueblo.
Al Ensamble Gurrufío, a Saúl Vera y su Ensamble, a Serenata Guayanesa y todos quienes ejecutan la música venezolana con excelencia.
A Vale TV, su excelente programación y su excelente equipo: María Eugenia Mosquera y los jóvenes que trabajan con ella.
A la XII Temporada de Ópera del Teatro Trasnocho de Caracas, de Enrique Berrizbeitia y Anabelle Domínguez. Ojalá hubiera temporadas así en todas las ciudades de Venezuela.
A los medios de comunicación que no han cedido ante las amenazas, presiones y arbitrariedades de las que han sido objeto. A RCTV que sigue firme ante el gobierno atropellador. A El Impulso y Correo del Caroní, firmes ante Cadivi.
Al programa de Equinoterapia de la Escuela de Equitación del Ejército venezolano «Negro Primero» y a todos los voluntarios que trabajan en él. Al programa de Equinoterapia de la Profesora Alejandra González en el Círculo Militar de Maracay, en particular a Bolívar, un ser humano extraordinario, especial con los niños especiales y la Equinoterapia del Capitán Daniel Donders en el Círculo Militar de Valencia.
A la Ley de Discapacitados, que toma en cuenta a personas olvidadas por la sociedad, deseando que no se quede sólo en teoría.
A las organizaciones de la sociedad civil Asamblea de Educación, Observatorio de Prisiones, Foro Penal y la Red de Veedores, entre otras, que luchan por los derechos de los venezolanos.
A la Conferencia Episcopal Venezolana, comprometida con el pueblo venezolano.
A la Fundación Conciencia Activa y al rabino Pynchas Brener, por su difusión de valores en un mundo globalizado. A la Revista 21 de Conciencia Activa y a su director, el Filósofo Atanasio Alegre.
A Leonardo Atencio, Rafael Arráiz Lucca, Oscar Belloso, Manuel Caballero, Germán Carrera Damas, Fernando Chumaceiro, Jesús Esparza, Sofía Imber, Ángel Lombardi, Luis Alberto Machado, Oscar Sambrano Urdaneta, Alexis Márquez Rodríguez, José Ignacio Moreno León, Guillermo Morón, Luis Pastori, Ramón J. Velásquez, Adalberto Zambrano, las academias y al mundo de la cultura en general.
A la Casa de Uslar, iniciativa de divulgar el mensaje y trabajo de Arturo Uslar Pietri, sobretodo a los más necesitados. Estoy segura de que tendrán éxito. Quiero destacar el trabajo de Antonio Ecarri, José Rafael Revenga, Néstor Ecarri, Joaquín Ortega y María Fernanda López.
A los humoristas Ana Black, Carolina Espada, Laureano Márquez, Claudio Nazoa, Graterolacho, Pamchito, Rayma, Rolando Salazar, Oscar Yanes, Pedro León Zapata, Weil que nos regalan sonrisas para sobrellevar el día a día.
A las fundaciones privadas, como el trabajo de Fundación Polar por la cultura y la salud, el de Econoinvest por la Cultura Urbana, la Fundación Fadel por la educación, Senosayuda y Senosalud por quienes sufren de cáncer de mama y tantas otras fundaciones cuya meta es el bien de los demás.
A los hospitales de la Gobernación del Estado Aragua, el de Los Samanes y el Ambulatorio del Norte, los centros de exámenes y diagnóstico, dispensarios y otros ambulatorios, ejemplos de lo que debe ser el sistema de salud a nivel nacional.
A todos quienes dedican sus vidas a cuidar de otras vidas, bomberos, policías, Defensa Civil, Protección Civil…
A los inmigrantes que aman a Venezuela como venezolanos.
A nuestra Vinotinto, a la Liga Profesional de Béisbol Venezolana, a mis Leones del Caracas, aunque pierdan. A Carlos Coste, Milka Dunno, el Proyecto Cumbre…
Al pueblo venezolano y a su decisión de vivir en paz, democracia y libertad.
