Operación libertad y Federación
La semana pasada fue tiempo para jornadas memorables. La primera de ellas es la profundización de la Operación Libertad, protagonizada de manera creciente y progresiva por alrededor de un centenar de estudiantes en huelga de hambre, en emblemáticos lugares de Caracas y de algunas ciudades del interior del país. La acción ha sido encabezada por un núcleo originario plantado a las puertas de la sede de la OEA. Son del dominio público las motivaciones de los huelguistas, los coquetos esguinces de algunos altos funcionarios y las tan insólitas como asquerosas reacciones de algunos voceros calificados. Entre ellos destacan el canciller Maduro y el biborlado, embajador ante la OEA y simultáneamente representante venezolano ante el Parlamento Latinoamericano, Roy Chaderton. Estos últimos proyectan la verdadera naturaleza de un régimen radicalmente alejado de los principios generales del estado democrático, actuando al margen y en contra de la Constitución de la República, pero agónico, con la cuenta regresiva en marcha. Nuestra solidaridad espiritual, material y política con estos valientes muchachos que siguen sumando apoyos cuantitativa y cualitativamente de los más variados sectores. La causa de la libertad para Venezuela, especialmente de los presos políticos y por el respeto de los derechos humanos, interpreta plenamente los anhelos de la decencia que sigue existiendo en la inmensa mayoría de los compatriotas.
En el marco del desarrollo de esta Operación, celebramos en Coro, capital del Estado Falcón, un Aniversario más de la Federación. De acuerdo a nuestra Carta Magna Venezuela esta definida como una República Federal, integrada por Estados y Municipios autónomos que deberían gozar de fueros y derechos especiales. Se les reconocen competencias exclusivas y excluyentes. También otras que deben ejercerse de manera concurrente con el poder nacional. Bastantes de ellas están señaladas expresamente en ese texto y otras desarrolladas por la legislación ordinaria. Todo esto y mucho más, también es letra muerta, contradicha radicalmente por un estado centralista y totalitario, jefaturado por un hombre de temperamento subversivo, enfermo de tiranía, que desconoce y destruye la estructura federal que juró sostener y defender, cumplir y hacer cumplir al tomar posesión de su cargo. Y lo hace en nombre, nada más ni nada menos, que del guerrero federal Ezequiel Zamora, con pretensiones insólitas de desconocer la historia falseándola, una vez más, al atacar alevosamente al mariscal Juan Crisóstomo Falcón, héroe epónimo del Estado que lleva su nombre, en cuya capital fue la celebración. Estuvo en cabezada por los gobernadores de Zulia y Táchira, la MUD regional y las verdaderas fuerzas motrices de aquella región.
Las luchas por la Libertad y por la descentralización política, es decir, por una estructura verdaderamente federal para la República, se dan la mano en una misma causa. Son la razón de ser de nuestros afanes.