Oasis deportivo

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Recientemente nos hemos enterado que la Fundación Empresas Polar, brazo de solidaridad social del complejo industrial privado más desarrollado del país, ha inaugurado y puesto a disposición de la comunidad un centro deportivo que es ejemplo de cómo se tienen que hacer las cosas en un país que se precie de serio.

Nosotros, en nuestro eterno deambular por otras latitudes, donde encontramos los ejemplos de cómo se desarrolla una sociedad, hemos admirado que en la mal llamada Westonzuela, Walt Disney propuso a sus urbanistas que desarrollaran una comunidad que fuera modelo de vida para una población media de Norteamérica.

Amén de haber construido una ciudad donde se respira calidad de vida y está administrada con el mejor criterio de buen uso de los recursos, encontramos en ella dos complejos deportivos donde sus habitantes, por una módica contribución mensual, pueden disfrutar de un conjunto de canchas deportivas que son de admirable calidad.

Con ese mismo espíritu, sin presupuestar pago alguno, dentro de una parcela de veinticinco hectáreas y con un criterio maravilloso, la gente de Polar ha construido un complejo donde existen cuatro canchas para el juego de beisbol, compatibles, naturalmente, con el de softbol; tres canchas de futbol de distintas dimensiones de manera que sirvan para el desarrollo de juegos y de equipos desde la categoría infantil hasta la de mayores y cuatro canchas con superficies de materiales de última generación para la práctica de volibol, basquetbol, futbol de salón, balonmano y deportes similares.

Además, cuenta con una edificación donde se alojan tribunas, espacios administrativos y salones de vestuarios para deportistas de uno u otro sexo. El costo de la obra es muy significativo y su mantenimiento requerirá de un buen presupuesto.

Mas como en todos los proyectos bien trabajados, los promotores del centro deportivo han realizado contactos y firmado acuerdos que permitan que este centro deportivo se transforme en un centro de enseñanzas especializadas en los distintos deportes que se pueden practicar y con organizaciones de nivel internacional.

Los beneficiarios de este centro deportivo son las poblaciones aledañas a San Joaquín en el Estado Carabobo y esperamos que tanto las autoridades del municipio como las organizaciones deportivas de la región le suministren el mayor apoyo y colaboración que seguramente se verán compensados con y por una organización empresarial que tiene muy clara su función dentro de la sociedad venezolana.

El deporte venezolano siempre ha sido un paria dentro de nuestra sociedad. Hemos vivido momentos estelares producto de circunstancias particulares pero, en general, hemos adolecido de una política deportiva que procure un desarrollo armónico donde se encuentren involucrados amplios sectores de la sociedad y dichas actividades trasciendan a toda la ciudadanía.

Ojalá esta iniciativa se contagie y puedan surgir otros complejos en otras latitudes de nuestra inmensa geografía y los beneficiarios sean la mayoría de los niños y jóvenes de esta aporreada patria.