Miss-Bala
En la alucinante cinta “Miss Bala” (*) del mejicano Gerardo Naranjo, se dibuja el aspecto más irritante del fenómeno de colusión, que es un término opuesto a colisión, de intereses entre los gans criminales ultra-violentos y las fuerzas armadas y policiales que se supone les combaten.
Terminas sin saber quién del ejército, o de la policía, era agente de las bandas o quien de las bandas era agente del gobierno. Y no hay manera de precisarlo, porque ya no puedes distinguir quién es quién, cuando se establece una situación ubicua y difusa, por demás común en el mundo del dinero mal habido, sea proveniente de la corrupción política o del crimen, de lo cual nos enteramos solo cuando empiezan a aparecer cadáveres e inculpaciones por TV de quienes fueron o son altos funcionarios.
El chavismo gobernante, en medio de su crisis terminal, ha traído a Venezuela un escandaloso método de campaña de intimidación, para cubrir sus actos criminales, que consiste en achacar a la oposición la purulencia de sus propios delitos.
Ahora resulta que los Carteles son de la oposición y hasta los manejos financieros y el tráfico mismo es agenciado por políticos contrarios al régimen.
Algo importante sospechan sobre un preponderante papel de una personalidad política como Salas Romer, en un escenario probable de implosión del régimen, para que desaten el delirio de querer vincularlo a delitos de lavado de dólares o el colmo de las acusaciones temerarias del ElAsaimi: “El gobernador Salas Feo financia al narcotráfico”
Desde que tengo uso de razón, he leído o escuchado que los narcos financiaban a los políticos y esas calumnias o verdades, eran el preanuncio para lapidar a cualquier figura pública, o por lo menos para arrinconarlo en el muladar de las sospechas.
Pero ahora el gobierno chavista inventó una vaina realmente novedosa: “el político financia al narcotraficante” Y es allí donde hay que parar la pelota y preguntarnos: ¿A donde se va a llegar con esta parranda alucinante de acusaciones?
Lo concreto sin embargo es que ya hay evidencias concretas y documentadas sobre gans criminales de secuestradores uniformados, de policías o de militares empleando cuarteles para guardar alijos millonarios de drogas.
Hay evidencias de altos personeros gubernamentales, en especial militares, que están metidos hasta los teque-teques en el mundo del delito y el régimen se empecina en obstruir cualquier investigación seria e imparcial sobre estas graves denuncias, prefieren la fuga hacia adelante, tratando de politizar el debate y poniendo al país entero en tela de juicio, cuando son ellos los únicos enjuiciables.
Solo falta que un día de estos elijan una Miss Bala.
(*)http://es.wikipedia.org/wiki/Miss_Bala
Miss Bala es una película dramática mexicana de 2011, escrita y dirigida por Gerardo Naranjo. La película se estrenó en la sección Un Certain Regard en el Festival de Cine de Cannes 2011. La película fue seleccionada como la entrada de México a la Mejor Película Extranjera en edición número 84 de los Premios Oscar, pero no llegó a la lista final.
La película está ambientada en la ciudad fronteriza de Tijuana, aunque en realidad fue rodada en Aguascalientes, que se encuentra exactamente en el centro geográfico de México. De esta forma la mayoría de las locaciones de la película son locaciones de dicha ciudad, por ejemplo, la Secretaría de Finanzas se convierte en el consulado norteamericano.
Miss Bala tiene ciertas referencias a casos de la vida real, incluyendo su tema principal, que al parecer esta parcialmente basado en el caso de la Miss Sinaloa, Laura Zúñiga, quién presuntamente estuvo involucrada con el narcotráfico. Además, uno de los personajes de la película, quién interpreta a un agente de la DEA, llamado Enrique «Kiki» Camara, es asesinado por el narcotráfico, dicho personaje parece hacer referencia al agente de la DEA Enrique Camarena Salazar, quien de hecho fue asesinado en los años 80