Misión Bombillo
Yo soy la Luz y vengo a traérsela yo mismo, mi hermano bolivariano. ¡Ábrame la puerta que sigue el Carnaval! Soy la Luz y ese bombillo que te entregan en mi nombre, EL SIEMPRE VENERADO, los milicianos del Caribe, es mi propio brillo que resplandecerá por los siglos de los siglos amén ¿No es así mis queridas Presidentas de los Poderes que les he dado yo? ¿No es así Constitución, Carta Magna para un Magno Magno, que escribo y dicto también yo para que yo pueda seguir siendo YO?
Ese bombillo que recibes hoy, enróscalo pues bien en tu cerebro para que por arte de hechizo se te ilumine la conciencia y veas con claridad lo que va a ser este país que tengo pensado, que anotó a la zurda, con la mano en la que tengo el bastón de mando, pero no sé cómo es que al final lo van a gerenciar estos ineficientes y holgazanes que tengo que remover día tras día, noche tras noche, por programas de la única emisora veraz, la del número rojito, redondito arriba, redondito abajo.
Ojalá pudiera clonarme a mí mismo para ser todo y todos a la vez, sin tener que dialogar, platicar, convencer, para, como hermafrodita político, sólo pensar y ejecutar todo de una sola vez, sin intermediarios ni interlocutores ni mesas de diálogo ¡zape! porque mejor es dar castrenses instrucciones que escuchar escuálidas razones.
Sí, lo saben bien, entiéndanlo todos, Soy y Seguiré siendo la luz, no me apagaré nunca, soy la Luz Perpetua, lo conoce con exactitud todo el órgano electoral y el congreso y el tribunal, y todo el que no quiera ver el fuego liberador de mi antorcha igualitaria, será cegado y condenado a ser preso sin juicio, profesional sin empleo, padre con sus hijos afuera, canal sin señal, periódico sin letra, a menos que prefiera ser conciencia comprada, comparsa de mi carroza, súbdito de mi reino.
Soy la luz y el bombillo, la energía y el nuevo vatio, encandílese con mi fulgor rojo rojito, que es más potente y eficaz que el mismo General Electric. ¡Cambie su bombillo, póngame en su lamparita de noche y tendrá los más dulces sueños bolivarianos!
