Maestro e ideólogo de conservadores colombianos
Para saber más del rol del Presbítero Sucre en Colombia, nos contactamos con una de las figuras más relevantes del mundo cultural del vecino país: Nos referimos al periodista, biógrafo y escritor Enrique Santos Molano, cuya pluma la ha plasmado en medios tan importantes como El Tiempo de Bogotá, como jurado en los más importantes certámenes literarios de Colombia, y en biografías de figuras como José Asunción Silva (“El corazón del poeta”), que la revista Semana consideró uno de los 100 libros colombianos más importantes del siglo XX …y por cierto su última obra es “Rufino José Cuervo, un hombre al pie de las letras”, que es la historia de una de las figuras capitales de la gramática latinoamericana, cuya influencia directa fue de Antonio José de Sucre Alcalá, el soldado de Dios que desterró Venezuela.
El impacto de la presencia del presbítero cumanés Antonio José de Sucre Alcalá en tierras colombianas se dejó sentir…tras partir expulsado de la Primogénita del continente, junto a su padre José Manuel, según las referencias de Monseñor Romero en “Las diabluras del arcediano”, llegó a tierras neogranadinas y se une a la lucha del líder conservador Julio Arboleda, misión exitosa en términos bélicos, donde además cuelga “formalmente” el uniforme militar para ingresar al mundo eclesiástico.
Pero la sotana no le impidió imponer su cosmovisión de mundo, específicamente la política, la que en el siglo XIX estaba ligada fuertemente al mundo eclesiástico, y en este sentido Antonio José de Sucre Alcalá influyó fuertemente en el ideal de un conglomerado político y en la enseñanza de líderes en la Colombia de la segunda mitad del siglo XIX, donde destacan dos nombres: Rufino Cuervo y Miguel Antonio Caro, el primero considerado en máximo filólogo de Hispanoamérica y el segundo, consolidó la modernización de Colombia como jefe de gobierno a fines del siglo XIX. Para que saber más del papel de este cumanés en la sociedad colombiana, nos contactamos con el periodista y escritor del vecino país, Enrique Santos Molano, cuya última obra “Rufino José Cuervo, un hombre al pie de las letras” (Instituto Caro y Cuervo), lo convierte en uno de los hombres de la cultura hispanoamericana que nos sirve de voz del pasado para que los cumaneses, venezolanos y el mundo sepan quién fue el ilustre sacerdote.
¿Cuál fue el rol del Presbítero Sucre en la formación intelectual de los señores Rufino Cuervo y Miguel Antonio Caro?
Para responder esta pregunta, lo mejor es citar lo que digo en mi biografía de Rufino José Cuervo: “Rufino José Cuervo y Miguel Antonio Caro, que se llevaban un año de diferencia, habían vivido en un medio intelectual y político de alta calidad. Perdieron a sus padres casi al tiempo, pues don José Eusebio murió de fiebre amarilla en Santa Marta en enero de 1853, y don Rufino de hepatitis en noviembre del mismo año.
La desgracia, además de la vecindad, cimentó la amistad entre las dos familias, y la viuda del doctor Cuervo, doña Francisca, actuó de acuerdo con la viuda de don José Eusebio, doña Blasina, en el asunto de la educación de sus hijos. Convinieron que Rufino José y Miguel Antonio avanzarían sus estudios en el Liceo de Familia, colegio que había creado en 1854 Antonio Basilio Cuervo y el canónigo Antonio José de Sucre, quien no había tomado aún los hábitos. Sucre –sobrino del Gran Mariscal de Ayacucho—después de la guerra fugaz de 1851, trabó ‘una amistad profunda con el joven bogotano Antonio Basilio Cuervo’ y fundaron en Bogotá un colegio con el nombre Liceo de Familia donde hicieron una verdadera revolución didáctica, adoptaron a Bello para la enseñanza del castellano y a Burnouf para la lengua latina.
Entre los jóvenes discípulos se contaban Rufino José Cuervo y Miguel Antonio Caro. Ya entonces Sucre era huésped de la familia Cuervo Urisarri, donde fue considerado como un nuevo hijo. El influjo de Sucre en Cuervo fue de importancia capital para la formación del futuro filólogo. “Don Antonio José de Sucre, varón insigne por sus talentos como por sus grandes cualidades morales, me enseñó la Gramática de Juan Vicente González, que fue, a pesar de algunos defectos, preparación para el estudio de la de Bello, que igualmente puso en mis manos aquel ilustre compatriota de usted. Al mismo debí librarme de las garras del seudo-Nebrija, y estudiar latinidad en dos libros publicados en Caracas: La Gramática de Burnouf y los Ejercicios de Vérien.”, expresa el propio Rufino José Cuervo en una de sus cartas, con lo que pone de manifiesto la importante influencia que tuvo el presbítero Sucre en la formación intelectual de Cuervo y de Caro, que fueron, sin duda, sus discípulos más aprovechados.
Para los lectores de Venezuela y América que no conocen a Cuervo y Caro ¿Me puede sintetizar la importancia de ellos en la vida colombiana?
Rufino José Cuervo y Miguel Antonio Caro son dos personalidades capitales en el desarrollo de la historia y de la cultura colombiana. Cuervo porque efectuó una revolución filológica en la lengua castellana y marcó, de cierta manera, el avance intelectual de varias generaciones que se inspiraron en su vida y en su obra. Una de ellas, por ejemplo, la generación llamada del Centenario podría considerarse como el fruto más acabado de las enseñanzas de Rufino José Cuervo. Miguel Antonio Caro dejó una vasta obra literaria, fue un ensayista profundo y riguroso, en varios campos: literatura, política y economía. Fue uno de los arquitectos de la Constitución de 1886 y el sostenedor principal de aquella completa transformación que vivió Colombia entre 1886 y 1898. Presidió la República entre 1892 y 1898 y sus reformas económicas, continuación de las adoptadas por su maestro el Presidente Núñez, permitieron que el país se industrializara y modernizara.
¿Qué relación tiene el sacerdote Sucre con el Partido Conservador de Colombia?
No sería exagerado expresar que el canónigo Antonio José de Sucre fue uno de los ideólogos más importantes del Partido Conservador colombiano, en una época en que los conservadores perdieron el poder y pasaron a la oposición. El canónigo Sucre fue un firme sostenedor de las ideas conservadoras, incluso hasta el sectarismo, y se enfrentó con audacia a los liberales radicales que asumieron el poder desde 1863. Sucre combatió al Presidente Mosquera, a quien calificó de anti Cristo y respaldó con su elocuencia, y aún con dinero, la causa conservadora.
¿Cuál es la imagen que proyectó Sucre en la opinión pública colombina del siglo XIX, tomando en cuenta su carácter polémico como lo señala el historiador colombiano Mario Germán Romero en “Las diabluras del Arcediano”?
Como lo cuenta en su libro “La lanza del Canónigo” Arturo Escobar Uribe, el presbítero Antonio José de Sucre fue, para los conservadores, un héroe; y para los liberales, un demonio. De la cual también da fe monseñor Mario Germán Romero en “Las diabluras del Arcediano”.