Locos y apoyados
Este gobierno ha acentuado el desprecio por las instituciones básicas de la democracia, ya muy maltratadas por el difunto, lo que obliga a los venezolanos a mantenernos alertas y a buscar con empeño los mecanismos más efectivos para defenderlas de esa arremetida autocrática.
Más de una vez hemos comentado aquella críptica advertencia del presidente de la AN, Diosdado Cabello, de que el difunto había sido un muro de contención para los “locos” de su partido; y que ya sin ese freno, quién sabe, de lo que serian capaces. Obviamente se propuso amedrentar a los opositores para que asumieran una actitud de resignación, para que no reclamaran, para que no protestaran, evitando así que los “locos” del PSUV, se lanzaran sobre ellos como jauría sedienta de sangre.
A pesar de que el equilibrio en sus actuaciones y la moderación en el lenguaje han sido rasgo predominante en la acción opositora, la violencia anunciada ha venido haciéndose realidad. Los atropellos de la Guardia Nacional y de los cuerpos policiales se reseñan diariamente en los medios de comunicación. No toleran que los ciudadanos protesten por los pésimos servicios públicos (luz, agua, salud, comida, educación, etc, etc) y por el desconocimiento de los derechos laborales. Los reprimen a planazos y a perdigonazos. Diosdado Cabello ha implantado en la AN un régimen cuartelario. Los televidentes vieron en pantalla a aquel gordo, con chaqueta tricolor, suplente del diputado Elvis Amoroso, allí presente, penetrando en el área de la bancada de oposición, repartiendo puñetazos a diestra y siniestra. No hubo sanción contra él. Es más, el diputado Amoroso, preside nada menos que la Comisión de Política Interior. Se recuerda así mismo el ataque alevoso contra el diputado William Dávila y la saña conque la fornida diputada Asencio, a taconazos le fracturó la nariz a la diputada María Corina Machado. A todos los ha cubierto el manto de la impunidad.
Ahora las calles de Caracas, aparecieron tapizadas de un afiche con las caras de Henrique Capriles Radonski, María Corina Machado y Leopoldo López, con esta amenazante e incitadora leyenda: “Reconócelos. Te quitan la luz, te quitan la comida. Te quitan la paz”. ¿Qué busca el gobierno Maduro/ Cabello con este afiche? ¿Acaso que uno de esos tres dirigentes sea víctima de un atentado que le cueste la vida y que los diestros cubanos de sus equipos de propaganda presenten como ejecutado por la oposición, para achacarle la culpa al gobierno? Por los antecedentes de quienes nos gobierna, esta hipótesis es absolutamente posible
