Las dádivas de Chávez huelen muy mal en Washington
Definitivamente Chávez le cae muy mal a los republicanos. Sí, muy mal. En los pasillos del Congreso de los Estados Unidos es casi un rumor permanente los avances que están llevando a cabo los republicanos, Joe Barton y Whitfield para abrir una investigación sobre las verdaderas razones de las dádivas que el presidente venezolano le esta dando a los barrios pobres de los estados de Massachussets, Nueva York, Maine, Rhode Island, Vermont y Connecticut.
Hasta mañana 23 de febrero dura el chance que le dieron al presidente de la Citgo, David Mc Collum de explicar los verdaderos fines de los programas iniciados por el gobierno venezolano para suministrar petróleo barato a los estadounidenses de bajos recursos.
Como se recordara, El líder del Comité de Energía de la Cámara de Representantes, Joe Barton advirtió la pasada semana que tenia sospechas sobre los fines político y no caritativos de la acción supuestamente filantrópica del régimen chavista. Barton envió una carta a la Citgo en la que solicita los antecedentes relacionados con el programa caritativo de Hugo Chávez y pidió que la respuesta sea antes de mañana jueves.
Barton dejo sentir sus temores de que la iniciativa se inscriba dentro de la política exterior cada vez más hostil y belicosa hacia Estados Unidos por parte del gobierno poco amistoso de Venezuela. La Citgo no ha hecho ningún comentario publico hasta la fecha.
Se comenta en el Capitolio las molestias que ha generado el programa de ayuda a los pobres del gobierno venezolano y el mismo Barton ha asegurado que los propósitos supuestamente altruistas de Hugo Chávez podrían camuflar sus verdaderas intenciones, en virtud de los sentimientos anti- estadounidenses del Chávez. A Barton le preocupa, y lo ha dicho públicamente, que Chávez este usando mecanismos de ayuda humanitaria para entrar y politizar el debate sobre la política energética de los EEUU.
De prosperar la investigación, ya se anuncian horas acalorada discusión sobre la materia, puesto que un grupo de demócratas, encabezados por el legislador Wulliam Delahunt esta de acuerdo con los programas de Chávez y ve con muy buenos ojos la iniciativa del gobierno venezolano y que según Delahunt esta teniendo un buen impacto en la vida de la gente en Norteamérica.
La discusión entonces enfrentara a republicanos y demócratas sobre a conveniencia o no para la política de los Estados Unidos del supuesto programa de ayuda a los barrios pobres. La administración Bush ya había rechazado programas similares ofrecidos por Fidel Castro y Chávez, el pasado ano, cuando Nueva Orleáns quedo sumergida entre las aguas y los dos gobernantes comunistas pretendían enviar médicos a la zona de desastres.
Para nadie es un secreto que tanto Castro como Chávez, utilizan los mecanismos camuflados de ayuda para penetrar en los barrios de bajos recursos y empezar a adoctrinar a la gente a favor del socialismo. Bajo el petróleo barato en el invierno, lo que permite que bajen los enormes costo de energía que deben pagar las barriadas de pobres, Chávez se va ganando el apoyo y la simpatía de cientos de personas. De hecho, ya el régimen socialista de Venezuela maneja que en los Estados Unidos hay un porcentaje superior a los 34 millones de pobres, que serian una buena cuota para „alborotar el avispero desde adentro mismo del imperio‰. Vamos a ver si Chávez puede comprar conciencias y simpatías en el mismo pateadero de su virtual archí enemigo, Georges W. Bush