La prioridad del objetivo: salir de este desastre
Sabemos que hay un equipo internacional asesorando para evitar en cambio que perjudique a la irreverencia internacional y un cable óptico conectado con el cerebro más maligno de la contemporaneidad.
Sabemos que quien cuenta los votos, llamado equivocadamente “el árbitro”, juega para el equipo del gobierno, que hay un RE trucado, que las maquinitas son una “caja negra” y que todos los poderes están prestos para defender una estela de ilicitudes.
Pero sabemos también que hay un país obstinado de tanta tracalería, incumplimiento y desatención intencionada de los grandes problemas que tiene la población venezolana
La cantidad inconmensurable de promesas incumplidas, el número incontable de las tropelías cometidas contra ciudadanos decentes de todos los estratos sociales, el temor inmenso de perder la vida ante la inseguridad personal o los bienes por aparentemente nimios que ellos sean, por el hampa o una voluntarista expropiación, hace que sea impostergable salir de la actual oligarquía gobernante.
Dadas las circunstancias objetivas existentes la mayoría de los venezolanos hemos decidido intentar la vía electoral para ambicionar, pese a las limitaciones conocidas, la derrota de la actual camarilla gobernante.
El intento incluye, a despecho de algunos, un pacto en una mesa de cuatro patas: organizativa, electoral, programática y de gobernabilidad.
Esa mesa, con el consenso de una gran mayoría democrática ha decidido realizar unas elecciones primarias para seleccionar un abanderado que nos representará a todos.
Felizmente, y con escasísimas excepciones, los precandidatos a esas primarias por la candidatura presidencial de la alternativa democrática tienen sobradas potencialidades para, contando con el apoyo de los otros, realizar un programa de reconstrucción nacional a corto plazo.
Nosotros pensamos que quien reúne las mejores condiciones para enfrentar el futuro es María Corina Machado; pero quien gane las primarias contará con nuestro apoyo y de todo el pueblo democrático venezolano que está consciente que el objetivo estratégico es salir de este desastre.