La dictadura dicta pero no dura: señales del colapso
Falcón traidor; Albornoz fuera; Vielma Mora pitiyanqui; Harnecker anti-revolucionaria; Dieterich, mercenario; Maduro, podrido; Mueller Rojas, senil; Baduel ladrón. Se deshoja la flor de la revolución.
Mientras tanto el trabajo de hormigita de la oposición venezolana en el exterior está dando sus frutos: Doce congresistas estadounidenses piden que el régimen venezolano sea declarado pro-terrorista. Los senadores John Ensign y George Le Mieux han liderado una petición al Departamento de Estado para que se revisen los lazos existentes entre Chávez y las FARC y otras organizaciones definidas como terroristas por el gobierno de los Estados Unidos. Este pedimento está apoyado por diez otros congresantes. En la carta a Hillary Clinton los congresantes dicen que no es un secreto que Venezuela [Chávez] desea dañar a los Estados Unidos. Su relación con Irán continúa creciendo y existen ejemplos concretos de las actividades terroristas del régimen venezolano. El Pentágono reportó recientemente la presencia en Venezuela de efectivos paramilitares iraníes. En el espejo de Miraflores Chávez se parece todos los días más a Manuél Noriega.
El cerco en torno a Hugo Chávez se está cerrando. Diego Arria presentará acusaciones en su contra en La Haya y en otras organizaciones internacionales de Europa. Los trabajadores de POLAR se paran frente al déspota.
En el país el PIB ha colapsado en casi 6 por ciento en el primer trimestre de 2010. El régimen se sigue endeudando de manera criminal. Las disensiones entre sus seguidores continúan, ahora con el alejamiento del último chavista eficiente, José Vielma Mora.
En la CVG quebrada ahora gerencian los trabajadores, en una grotesca demostración de populismo destructor.
A PDVSA se le hunden las gabarras y se le paralizan las refinerías mientras hacen maniobras «militares»para «repeler la invasión gringa».
El país está paralizado por falta de dólares. Se avecina una quinta devaluación.
Atracan a generales dentro de Fuerte Tiuna.
El país en caos, la anomía se presenta en escena. La dictadura dicta pero no dura.
Publicado por Gustavo Coronel
