La Casa rojilla
La Casa Amarilla ha sufrido varias transformaciones que representan cambios importantes en la vida política del país. De Cárcel Real a Cancillería pasando por haber sido Despacho y Residencia Presidencial y por supuesto lugar donde nació la patria, el 19 de Abril de 1810.
Ahora la revolución bolivariana le ha dado nuevas funciones al convertirla en albergue para damnificados.
La situación de las lluvias ha sido terrible. En casi mil refugios se alojan a unas 140 mil personas, cerca de 35 mil familias. En la esquina de Principal hay 105 personas, las cuales ya han sido mostradas protocolarmente al Ecuatoriano Correa para que junto al caudillo de barinas se tomaran fotos y dieran vítores a la revolución bolivariana. !Que verguenza!
Frente a una trajedia nacional como esta, no hay sitio en donde no se pueda ubicar a los damnificados, pues es asunto de vida o muerte.
Pero, tomar un monumento nacional para esos fines debería ser una última opción
La colocación de los damnificados en la Casa Amarilla no es un acto humanitario sino un acto de populismo o propaganda política para favorecer al régimen. Que todos vean lo bueno y desprendido que es y así tapar su fracaso. Sabemos que no fue la sequía la que provocó el descalabro eléctrico en el país. Tampoco son las lluvias las que han provocado la crisis de vivienda. Esta trajedia no es nueva, ya pasó en
1999 y en 2005 y un poco de planificación habria hecho que lo inevitable no causara tanta desgracia.
Pero esta dictadura que se sustenta en la propaganda y no en sus logros concretos- que no tiene-, que quiere acabar con los medios independientes y con el libre acceso a Internet necesita símbolos.
Muestra a estos compatriotas en desgracia para mandar el mensaje que lo está sacrificando todo, cuando en realidad no ha hecho nada o al menos no ha hecho nada bien.
Al gobierno habría que cantarle la canción con la que se burlaban los caraqueños de la Casa Amarilla: “Te vestistes de amarillo pa’que no te conociera”, es decir, eras la carcel y como te pintaron de amarillo ahora te muestras como un palacio o como sede del gobierno y quieres deslumbrar, pero ya sabemos quien eres… La presencia de damnificados en la antigua Casa Amarilla tranformada en Casa Rojilla, no es más que demagogia hacia adento y hacia afuera del país. Ya es imposible ocultar que aunque se vista de rojillo lo que se esconde es la bota militar de la dictadura.
A todos feliz navidad y a preparase para un año que puede ser decisivo para la democracia