Hacia un programa alternativo nacional venezolano
En el recién celebrado Encuentro Nacional Republicano se decidió presentar a Venezuela un programa de acción constituido por un proyecto político de la gente basado en los valores de participación, entendimiento, reconciliación, tolerancia y respeto que potencie el poder social constituido por ciudadanos libres en procura de un país coincidente para todos que viva en bienestar y libertad, haciendo el progreso enfrentando la redistribución fracasada que enarbola el populismo demagogo.
Nos preocupa el necesario rescate de los valores nacionales, la fuga de talentos y capitales así como la desmitificación de seudo héroes foráneos con los cuales se pretende vulnerar la nacionalidad.
Para lograr con rapidez el desarrollo y eliminar la pobreza hay que dejar a los ciudadanos en libertad, sin tutelas ni amarras, abrir la economía, eliminando los aranceles y protecciones a productores en lo agrícola, industrial y financiero. Hay que garantizar la independencia de los poderes públicos, la probidad administrativa y la desmilitarización de la administración pública.
Propugnamos eliminar los impuestos aduanales, tener fronteras abiertas a capitales y personas, incluyendo a los profesionales. Equilibrar el IVA y un impuesto parejo a los ingresos eliminando las exenciones, contribuciones, timbres y estampillas, herencias y todos los demás robos tributarios. Sólo con esto, el ingreso real de los pobres aumentará ostensiblemente sin afectar el presupuesto porque se reducirá la evasión.
Los contratos laborales deben ser voluntarios para las partes y así lograr el pleno empleo, como ocurre en todos los mercados libres, que se equilibran solos. Impulsaremos el libre emprendimiento, sin trámites municipales, estatales, tributarios o laborales, y la papelería inútil se eliminará.
La educación debe ser libre, sin programas, textos, acreditaciones ni pruebas oficiales. Las comunidades educativas elegirán un directorio y competirán, lo que mejorará la calidad. Las universidades deben conservar su autonomía y deberá establecerse un programa de becas en calidad de préstamos sin intereses para la demanda de quienes no tengan capacidad de pago y en base a un baremo. Deberá reasignarse recursos hacia el nivel básico y medio para las instituciones de carácter publico.
Derrotar la economía de puertos, la dependencia alimentaría, la estanflación y el Estado Rentista logrando mayores niveles de competitividad y productividad creando condiciones para el desarrollo de la infraestructura productiva (vías, sistemas ínter modales, centros de acopio, plantas de procesamiento, etc.), que permitan reducir la brecha tecnológica a través de una interacción entre productores, empresas agropecuarias y el conocimiento para optimizar la producción agropecuarias.
Con pleno empleo, libre emprendimiento, apertura y educación de calidad, saldremos del subdesarrollo, mejorando la distribución del ingreso; sobre todo, si se incentivan la fortaleza familiar y se extiende y defiende la propiedad de los pobres contra el crimen. La inseguridad es una de las circunstancias más hostiles que vivimos cotidianamente, sobretodo entre los sectores populares.
En salud procuramos la descentralización con visión de conjunto financiado por recursos provenientes de los sectores públicos y privados creando un subsidio por carga familiar a todos los hogares pobres cerrando las oficinas, programas, regalos de dinero y ministerios que están de más.
El patrimonio de todos los ciudadanos se lo devolveremos, para aprovecharlo: tierras, aguas, islas, bosques, termas, orillas de lagos, playas, reservas mineras, estuarios y empresas estatales. En lo ambiental, donde el crecimiento, los derechos de propiedad, las reglas simples de protección y el uso de tribunales deben reemplazar al prohibicionismo vigente.
En política, apertura y competencia, con libre entrada, Estado neutral, prohibición de reelecciones y gastos reservados, altos quórum para leyes represivas –como las tributarias o las contrarias a la libre empresa, y un federalismo, con regiones y municipios con poder y autonomía.
La libertad requiere de responsabilidad y respeto por los demás. El Estado debe hacer bien lo que hoy hace mal: velar por los derechos ciudadanos, libertad, propiedad, cumplimiento de los contratos, seguridad y justicia de verdad, disuasivas de los delitos, sin leyes represivas inútiles y costosas.
Estas ideas constitutivas de un Programa Alternativo Nacional Venezolano, enmarcadas en los conceptos de la Democracia Republicana y Liberal, las entregamos para la libre opinión de los venezolanos de los cuales esperamos sus comentarios y sugerencias para la mejora y actualización necesarias en busca de un país coincidente que procura vivir en bienestar y libertad mediante el disfrute de las ventajas que proporciona la contemporaneidad.
*Presidente del Movimiento Republicano MR