Guyana, el Caribe y la ONU
En un reciente comunicado, la Comunidad del Caribe (CARICOM), al final de la reunión de su Consejo para las Relaciones Exteriores y Comunitarias (COFCOR), celebrada en Paramaribo, Suriname, entre el 3 y 4 de mayo, reitera su acostumbrado y automático apoyo al mantenimiento de la integridad territorial y la soberanía de Guyana, en el marco de la controversia con Venezuela sobre el territorio Esequibo.
Sin embargo en esta ocasión, el COFCOR califica como lamentable la objeción venezolana frente a la solicitud de Guyana a la Comisión de Límites de la ONU, para ampliar su plataforma continental, sin consultar con Venezuela y sin resolver la controversia sobre el Esequibo. Además Guyana logró que el COFCOR mencionara que no existe una disputa territorial entre Guyana y Venezuela. Lo cual es un evidente desconocimiento del Acuerdo de Ginebra de 1966, que es el marco jurídico que regula la controversia venezolano-guyanesa. Incoherentemente, el comunicado toma nota que ambos países mantienen su confianza en el proceso de los Buenos Oficios del Secretario General de la ONU, según previsto en el Acuerdo de Ginebra.
Es incoherente decir que no hay disputa territorial, cuando una de las dos partes afirma que la hay y cuando además existe un proceso de negociación bilateral al respecto, con los Buenos Oficios del Secretario General de la ONU, en el marco del Acuerdo de Ginebra, que afirma: se debe buscar “soluciones satisfactorias para el arreglo práctico de la controversia”.
Según Guyana, la controversia mencionada en el Acuerdo de Ginebra se limita a establecer la validez o nulidad del Laudo Arbitral de 1899, considerado nulo por Venezuela. Si eso fuese cierto, no se entendería la razón por la cual Guyana aceptó firmar el Acuerdo de Ginebra. Simplemente, se debería haber ido a la Corte Internacional de la Haya.
Es indudable que, jurídicamente, para Guyana, el acuerdo de Ginebra es innecesario y deletéreo. Cheddi Jagan, el ya desaparecido ex Presidente de la república y líder fundador del Partido Progresista del Pueblo (PPP), actualmente en el gobierno, como jefe de la entonces oposición guyanesa, se opuso a la firma del Acuerdo de Ginebra y, en su obra “The West on Trial”, escribe al respecto: “El gobierno de coalición PNC-UF firmó conjuntamente con los gobiernos venezolano y británico el Acuerdo de Ginebra…y creó una Comisión Mixta (Guyana-Venezuela). Así se concedió reconocimiento a la espuria reclamación territorial venezolana y lo que era un caso cerrado desde 1899 fue reabierto.” Es interesante destacar que estas palabras del líder fundador del actual partido de gobierno guyanés admiten claramente que, con la firma del Acuerdo de Ginebra, Guyana concede reconocimiento a la reclamación venezolana y acepta reabrir el caso que, supuestamente, había sido cerrado con el Laudo de 1899.
La Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la ONU decidió pasar la solicitud de Guyana a una sub comisión. El Gobierno venezolano debería iniciar una ofensiva diplomática a través de la Cancillería y del negociador por Venezuela el “Facilitador” Embajador Roy Chaderton para aclararle a la comunidad internacional ,a la CARICOM en general y en particular a los tres países que son “aliados” de Venezuela en el ALBA, la posición venezolana, reafirmando nuestros derechos, pero también nuestra disposición a encontrar en la negociación una solución práctica y mutuamente satisfactoria a la controversia.
Además el Gobierno venezolano, dada la relevancia de las funciones del Facilitador, debería nombrar a una persona que pueda atender sus funciones a tiempo completo. Algo imposible en la actualidad, tomando en cuenta que el Embajador Chaderton es también Embajador ante la OEA, Diputado principal al Parlamento Latinoamericano y miembro del recientemente integrado Consejo de Estado.