Opinión Nacional

Faltará Avenida, sobrará gente

En la duda, hágalo. Si no usted no está convencido de que esa es la formula, asista y si tiene pensamientos cruzados que le producen miedo, quíteselos de encima. Es por el país, es por nuestros hijos. No me diga que está cansado de marchar sin resultados, porque tampoco servirá de excusa para explicarle a sus hijos del porqué perdimos un país.

Nunca saldremos de este hueco, hasta que no demostremos con solidez que somos muchos los que nos oponemos a esta barbarie. Jamás podremos reclamar una trampa electoral, si de por medio no encontramos como convencernos a nosotros mismos –y a ellos- de nuestra magnitud. La única forma de saberlo es en la calle. En la calle no hay circuitos electorales, no hay caza huellas, listas de electores ni funcionarios mal encarados buscando como prohibir nuestro voto. En la calle nos vemos las caras unos a otros y reconocemos nuestras rabias. En la calle no nos revuelve el estomago las sonrisas insolentes de los funcionarios electorales que manipulan las reglas y en la calle, en el asfalto, encontramos la verdadera esencia de nuestra identidad nacional. La calle protegió los votos de los gobernadores que hoy no se visten de rojo, pues si los votantes no hubiesen demostrado su voluntad en las marchas preelectorales, nos hubiesen robado los triunfos en las mesas. Es la calle la que nos da legitimidad. La calle lo puso a renunciar cuando sintió un pueblo que se le venía encima.

Los pueblos aguantan la opresión hasta que descubren que son más que los opresores. Cuando eso sucede, las sociedades buscan sus caminos para liberarse y lo hacen por métodos que nadie daba por posibles apenas horas antes de que sucediera. Las sociedades son orgánicas, vivas, dinámicas y en ese orden de ideas, se cohesionan en minutos y cambian de dirección, de la misma manera que lo hace un cardumen de peces, enfrentado a un peligro. Lo que usted da por hecho hoy, puede cambiar mañana, pero para que suceda, debemos todos empujar en la misma dirección, con perseverancia, con voluntad y el compromiso necesario para que logremos el objetivo deseado.

Mañana seremos muchos. Me sobran razones para pensarlo y mañana, se romperá el esquema de que se marcha hacia el oeste, saliendo desde el este. La ruptura de ese paradigma producirá una gran sorpresa, ténganlo por seguro. Mañana mucha gente llenará la avenida Miranda, con menos prisas de regresar de las que se tienen cuando llegamos a la avenida Libertador. Por primera vez, la Avenida Francisco de Miranda será un escenario de grandes magnitudes, haremos historia, de nuevo un veintitrés de enero, fecha en repetidamente, se han dado grandes movilizaciones en este país. En esa fecha se dio la primera gran marcha para oponerse a la ley de educación.

El que asista con la idea de que una marcha termina en un golpe de estado, terminará frustrado de regreso a su casa, llamando come flor a todo el que encuentre en su camino. Una concentración como la que haremos mañana, servirá para renovar nuestros ánimos, nuestro espíritu de lucha y más importante, para que muchas personas que dudan de nuestra fuerza, se convenzan de que ahora somos una imponente mayoría trabajando por recuperar el país que esta locura nos quiere arrancar de las manos. Mañana sorprenderemos al mundo.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba