Fallido acto oriental del Psuv
Mide el descontento dentro del chavismo
Es un signo de los tiempos de cambio. El “gran acto oriental” del Psuv para juramentar a los Batallones Bolívar 200 en la “Fase de Despliegue”, se hizo tan solo a medias, cuando Chávez desistió de llegar al estadio Olímpico de Barcelona tras los informes de Casa Militar sobre la escasa asistencia.
Algunos informes del Psuv dicen que el presidente estaba en el Maremare y que desde allí, tras regañar muy fuerte por teléfono a Tarek Saab y Aristóbulo, se regresó a Miraflores. Eso no lo puedo asegurar aunque lo del regaño telefónico luce veraz dado el rostro desencajado de Istúriz. Algunos reportan que Chávez habría amenazado con sustituir al gobernador anzoatiguense al frente del comando Bolívar 200 de esa región, pero habrá que esperar a ver si se llega a tanto.
“El único Estado que cumplió totalmente con las cuotas fue Sucre. Los autobuses si venían llenos, pero el local, Anzoátegui fue algo flojo, igual que Monagas. El peor fue Nueva Esparta”. Lo cuenta un dirigente del sur de Anzoátegui integrante de los equipos de control “logístico”. Desde la gobernación de Bolívar hubo muchos autobuses, sobre todo los del transporte público, que llevan el logo de la gobernación pero la cuota estuvo falla. Ni siquiera fue el gobernador, que anda en gira por Europa. En su lugar estuvo José Ramón Rivero por lo cual otros grupos internos del Psuv tanto en el área laboral como de Caroní fueron excluidos.
Cuando vieron las fallas del acto, prohibieron el ingreso de los periodistas de todos los medios de comunicación de allá, sin importar su “línea editorial”, excepto el canal 8 y radio Nacional. Por eso las únicas fotos son de militantes oficialistas mediante celulares. Y aún en ellas se ve claro lo que ocurrió. En el canal 8 mostraban “tomas cerradas” y jamás mostraron ni la llamada “tribuna popular” ni las gradas detrás de uno de los arcos. E incluso en la tribuna principal mostraban los grupos compactos evitando los enormes claros.
El estadio “José Antonio Anzoátegui” tiene capacidad para 37 mil personas. Ayer estaba clausurado el acceso a la llamada tribuna popular frontal “no techada” que permite el ingreso de 15 mil personas. Y de las dos tribunas no techadas detrás de los arcos, para 8 mil personas cada una, solo se habilitó la que daba de frente a la tarima. Los organizadores lograron, así, reducir el aforo que debían llenar a 15 mil personas de 6 Estados mas mil sillas colocadas en el engramado frente a la tarima. Ese espacio fue el único lleno. Algunos psuvistas dicen que la tribuna principal, con capacidad para 9 mil personas “estaba al 45%”. No lo puedo asegurar pero es probable, dada la decisión de tomó Chávez de regresarse. En la foto publicada en twitter anoche (que reproducimos aquí) por un entusiasta partidario del gobierno, se notan los grandes vacíos. El twittero oficialista que la publicó estaba eufórico del “gran acto” donde “los escuálidos tiemblan”. Juzguen ustedes mismos.
Un trabajador de un ente público relató que el ingreso significaba pasar por toda clase de medidas de seguridad, incluyendo detectores de metal, revisión de celulares y la obligación de enviar un mensaje de texto a un número 489 (costo BsF3, mas básico, mas Iva) con número de cédula, para chequear la asistencia y sin embargo hubo muchos “supervisores” con listas de 20 personas que no lograban asegurar 5. “Hay mucho descontento, a pesar de las presiones”.
Desde las 12 del mediodía se abrieron las puertas del estadio a los grupos rigurosamente chequeados y se les entretuvo con música y algunos discursos hasta las 5pm. “Pero ya a las 3pm o 3.30pm se retiró Casa Militar, signo de que los informes habían llevado a Chávez a abortar su asistencia al acto. Los jefes de Batallones quedaron a cargo del orden y la cosa se puso mas desordenada. En ese momento fue que desaparecieron por algunos minutos algunos de los jefes y solo permaneció Darío Vivas. El regreso de Aristóbulo fue patético por su rostro pero se repuso y habló como a las 5pm. En lo que dijo que Chávez no vendría, aquello terminó de vaciarse”.
Sobre el final, algunos de los organizadores, quizás para justificarse, le decían a los militantes que “Chávez no asistió por razones de seguridad” y otros mas audaces, con una imaginación de poca credibilidad, pusieron a correr rumores sobre “combates del ejército venezolano en la frontera con guerrilleros de las Farc”. Lo segundo es absurdo y obviamente sin sentido. Lo primero es solo una excusa para tratar de frenar el reclamo de las bases.
¿Cuántos miles de millones de bolívares le costó ese acto al estado venezolano a pesar que era un evento privado de un partido político?. ¿Cuánto gastó cada gobernación, cada alcaldía, cada ministerio?. Autobuses alquilados, logística, alimentación, propaganda, tarima, sonido, movilización de equipos de los canales oficiales. ¿Con que carencia comparamos ese derroche? ¿Con las Escuelas Bolivarianas sin los alimentos del Programa de Alimentación Escolar?. La corrupción “revolucionaria” desbocada y sin pudor por las carencias sociales.