Exitosas y Fracasadas
Leyendo la Historia se puede distinguir entre las revoluciones exitosas y las fracasadas. En líneas generales puede decirse que las revoluciones económicas y tecnológicas han sido extremadamente exitosas. Tal fue el caso de la revolución en la navegación que permitió a portugueses llegar hasta Asia en el siglo XV, o la revolución industrial del siglo XVIII, que elevó la producción textil y otras manufacturas con la introducción de maquinarias fabriles. Destacan los grandes cambios del siglo XX, con la revolución verde que impulsó la producción de granos en la India o con la revolución de la tecnología de la información que ha unido a pueblos distantes e incluso a habitantes de una misma región o país.
Por el contrario, las llamadas revoluciones políticas fruto de asonadas militares o de rebeliones violentas, han provocado, por avasallantes, caos, confrontaciones y hambrunas. Tal es el caso de la revolución francesa que habiendo derrocado a la monarquía y aplicado el terror, terminó en el imperio napoleónico después de haber devorado a Danton y Robespierre dos de sus principales artífices.
Qué decir de la revolución bolchevique de Lenin o de la revolución china del gran conductor Mao, que con sus regímenes oprobiosos dejaron en el camino millones de muertos sometiendo a sus pueblos a sistemas de servidumbre y escasez para al final caer en manos del odiado capitalismo. No olvidemos la revolución mexicana, la que comenzó el civilista Madero, pero que vio pasar en sucesión, decenas de caudillos militares y agraristas ávidos de poder hasta culminar en la dictadura de partido más prolongada de América. ¿ Qué nos ofrece la revolución cubana que pueda trascender en beneficio de la humanidad ? Un estado totalitario, una juventud sin futuro, una sociedad sin valores, un pueblo mal vestido y alimentado mientras los gobernantes disfrutan de escandalosos privilegios.
Los que hoy ostentan el poder en Venezuela, pretenden imponer una revolución socialista ignorando sus fracasos. Este empecinamiento ideológico tendrá un alto costo para el pueblo pues no hay manera de alcanzar beneficios materiales con el desarrollo endógeno, ni capacitar jóvenes con una educación ideologizada, ni trabajar por la paz en medio de una carrera armamentista. La historia implacable se los devorará como a sus antepasados.
Juan Antonio Muller
