¿Esto va para largo?
Después de cuatro meses se desvanece el “triunfo” del 2D, pareciera se trató de un volátil escarceo, porque la llamada oposición no sabe aprovechar la coyuntura política.
Son tiempos en que el CNE no ha dado los resultados definitivos, y el oficialismo por su lado poco a poco va concretando lo que la disidencia venezolana le negó ese 2D.
Chávez hace lo que le viene en ganas y la izquierda populista se riega en el resto de Latinoamérica estimulada por él. Pronto veremos como las dubitaciones y yerros de nuestros “opositores” no tendrán desahogos momentáneos en los supuestos entes judiciales. Tampoco, lamentablemente, se logra definir una resistencia activa que pueda darle respuestas a las agresiones del régimen y orientar a la sociedad civil. Grupos disidentes se radicalizan y se auto excluyen, la soberbia e indefinición no les permiten su crecimiento, a pesar de contar con gente valerosa. La “oposición” cada vez se difumina más y las tareas políticas quedan a cargo de los gremios y organizaciones civiles.
Chávez les hace un paralelo a las otrora organizaciones de masa, la CTV murió desde que comenzó la persecución contra su líder Carlos Ortega, los demás se encargaron de velar por sus “intereses” personales y hoy casi nadie los recuerda a ellos ni a la CTV.
Algunos dirigentes estudiantiles se convirtieron en “políticos” y desaparecieron de sus verdaderas lides, otros están allende de esta tierra, que cifra tantas esperanzas en ellos.
Actualmente, vemos como de nuevo Chávez con su chequera milagrosa trata de darle un vuelco a las cosas, no define candidaturas ni tampoco existe una posibilidad real de que se realicen elecciones. Si sigue al paso que va es muy posible que de aquí a noviembre ya no exista el mismo “ordenamiento” territorial, sino el que imponga la Asamblea Nacional “oficial”, entonces los gobernadores y alcaldes y la descentralización se habrá perdido. Los subterfugios siguen, el oficialismo puede diferir la aprobación de los currículos por la no realización de elecciones.
Este colorín colorado está cada vez más largo, llevándonos a la ruina con la propiedad privada en extinción, los militares imperturbables, sumisos y cumpliendo órdenes de allanar tierras productivas. Lo menos importante es la creación de la supuesta reserva, conocemos la idiosincrasia de nuestros compatriotas y difícilmente saldrán en un momento de aprietos a defender a alguien. Sin embargo, el ejército pareciera se hizo tan “comunista” como Chávez y no se percatan que vamos directo al abismo.
Al lado de los problemas capitales, está el ex Fiscal, una “bobería”, aunque haya dañado reputaciones y empecatado a ciudadanos. La muerte de Venezuela estará en la perdida total de sus libertades, cuando no podamos ni escribir en los periódicos ni disentir públicamente.
El remanente del infierno lo conforma la inseguridad, el alto costo de la vida y la falta de alimentos, pero que carajo, la “oposición” piensa sólo en sus elecciones, esperando coger mangos bajitos y Chávez si sabe hacia donde los dirige. “Preservando los espacios” personales y olvidándose de Venezuela, ése parece ser el razonamiento, mientras con ellos no se metan, agarrando aunque sea fallo, de esa manera toman las cosas nuestra enteca “oposición”. Ojalá, de aquí a noviembre surja algo que haga modificar esa conducta y las escisiones dentro del chavismo se revelen para que le enseñen a nuestros “opositores” como se ejercen esas competencias. De lo contrario el camino seguirá siendo largo, signado por las añagazas de un Chávez experto de todas las debilidades de sus “contrincantes”
Las esperanzas de libertad nunca se pierden, lo que se pierde es el tiempo, tan preciado, viendo a los “actores” políticos, inscribiendo candidaturas para un proceso inciertos y con las apetencias de ponerse en un ápice burocrático, importándoles poco la democracia del país. En Latinoamérica, lo que quiera aplicar Chávez colapsará a pesar de sus obvenciones, en el resto de la región si hay opositores de verdad.
