Esa película me la contaron…
Tengo miedo a paralizarme ante la sucesión de hechos pavorosos que a diario nos están amenazando. El viernes 7 de julio, un frío desagradable recorrió mi espalda cuando me enteré de lo que le habían hecho a Rafael Tudela; saber que es una repetición de la serie de atentados brutales contra personas pertenecientes a grupos empresariales y sociales específicos, me lleva a pensar y como el dicho: piensa mal y acertarás que no son hechos aislados, son acciones de una estrategia que a mi juicio, busca que mucha gente, gente capaz de enfrentar a un tirano, a un proyecto político enmarcado en el totalitarismo, el comunismo o cualquier ‘ismo’, aterrados, vejados, humillados, se vayan del país dejando el campo abierto al frente ‘Ceresole/Castro/Marulanda’, para implantar en Venezuela el centro de operaciones de un plan continental que les permita revivir aquellos tiempos de peroratas cantadas, ridículas y gastadas de ‘Al burgués implacable y cruel, siempre cruel, no le des paz ni cuartel’… Porque también es una estrategia no combatir a esta nueva camada de delincuencia sádica y brutal, que puede vuelvo a pensar mal ayudar con sus actos, a salir de ‘esa oligarquía’ que tanto molesta a la involución. ¡Oh! perdón, quise decir a la revolución.
Porque es más fácil amordazar al pueblo llano, al hombre sencillo al cual se le puede aterrar con la posibilidad de una ‘visitica’ a los predios de Otaiza, con el despido del carguito público, o más adelante, con la suspensión de una cartilla de racionamiento. Porque, señores ¡pa’allá vamos! ¡Mi Dios! ¿será este atentado a Tudela, la ‘Kristallnarcht’ del chavismo? ¿Será la noche de los cráneos rotos en similitud con la Noche de los Cristales Rotos, de aquel triste recordado 9 de noviembre de 1938? Y por cristales uso cráneo, ya que la esencia es la misma, es la arenga repetitiva, sistemática que está alimentando el deseo y la acción que destruya vidas y propiedades, en una orgía de violencia salvaje.
Esta película me la han contado mil veces familiares, amigos, conocidos. De ella también he leído varias reseñas… Y resulta inevitable que mi cerebro comience a vincular, a comparar, a mandarme alertas… Comienzo a ver puntos en común entre este Gobierno y ‘su proyecto’ y el nacionalsocialismo (o nazismo) y el fascismo, en versión ‘Fiesta en Elorza’: autoritarismo, expansión y preponderancia de la presencia militar, y una marcada propaganda, dirigida a avivar esa tradición romántica de oponerse al liberalismo y a la democracia. Comienza mi angustia desde el mismo momento que el encargado de contarle historias a Chávez, historias de gente que hay que citar, porque hacerlo ‘viste de estratega y de culto’, le contó sobre un tipo llamado Friedrich Nietzsche, ese alemán al cual, posiblemente el candidato-presidente sería capaz de nombrar ‘Hijo Ilustre de Sabaneta’ al enterarse por pura carambola que el tipo idealizaba al Estado y exaltaban el culto a los ‘individuos superiores’ que en lenguaje caribeño, son estos que impulsan ‘La revolución pacífica’, la V República y ese ‘mar de felicidad’ que habrá de sustituir al mítico Caribe, y gracias al eje Castro/Chávez, será el Mare Nostrum. A ese ‘catirote’ que entendió hace un montón de años que a los tipos como él (nuestro benemérito versión tercer milenio), es imperioso eximirles de ajustarse y aceptar limitaciones convencionales. Quizá, ahora en Hannover hasta trató de que se lo localizaran para decirle ¡Danke vielmals hermano querido!
Esa historia y mi gusto por ella, me llevan a comparar. Así me asusto cuando releo que desde 1933 hasta 1935, la estructura democrática de Alemania fue sustituida por la de un Estado completamente centralizado. La autonomía de la que anteriormente habían disfrutado las autoridades provinciales quedó abolida y los gobiernos regionales quedaron transformados en instrumentos de la administración central, que los controló estrictamente. El Reichstag o Congreso, pasó a desempeñar un papel meramente formal (cualquier similitud con el Congresillo no es pura coincidencia). Me paraliza revisar otra vez, cómo el nazismo por un proceso de coordinación, fue ahorcando a todas las organizaciones empresariales, sindicales, sociales y agrícolas, así como a la educación y la cultura, para convertirlas en entes supeditados a la dirección del partido, y hasta la Iglesia protestante, credo practicado por la mayoría del pueblo alemán fue infiltrado, atemorizado y sojuzgado.
Sí Chávez, ‘esas películas’ me las contaron, y por eso puedo detectar que, igual que Castro, tu obsesión fue crearte una Constitución, igualita a la que tu ídolo se mandó a ‘cortar’ a su medida en 1971. Esa ‘patente de corso’ que abrió la más brutal arremetida contra el pueblo cubano y sus libertades, logrando con la farsa visos de institucionalidad, y permitiéndole al tirano, esconder, de alguna manera, la falta de elecciones libres. Un poco lo que hoy hace que el Presidente brasileño, engolosinado también con los negocios que puede lograr aquí, diga que Chávez ‘se ajusta a la Constitución y a las leyes’. Un amigo me hizo llegar la Constitución cubana, al leerla, me sorprendió ver el uso de algunos verbos, y distintos tiempos de acuerdo al sujeto: modo indicativo para el pueblo (debe o tiene que ser) y el subjuntivo para el gobierno y el Estado (pudiera, tratara). Luego he seguido indagando, rebobinando la vieja película para poderla ver yo… Las Brigadas de Acción Rápida, de total hechura fidelista. Los ataques a los medios de comunicación, el cierre de toda posibilidad disidente… La búsqueda de una estigmatización social de toda voz o actitud contraria al régimen, apoyada por acciones directas y contundentes del ‘soberano’, representado en esas ‘Brigadas de Acción Rápida’ que de inmediato conocen del disidente, su nombre, su dirección, y a por él van, armados de palos y piedras. ¿Le resultará conocido esto que aquí señalo a varios que han osado enfrentarse a Chávez?
Es la misma película que vieron los cubanos en la década de los 70, cuando el ‘vitalicio’, invitó a todos los exiliados que estaban en EEUU, a visitar a sus familiares en Cuba. Ellos vieron al pueblo cubano asustarse, inhibirse al no saber si recibir a los familiares públicamente o simular no haberles visto, después de hacerlo a escondidas. El Partido Comunista, único en Cuba, ese modelo de pluralismo que desean para nosotros Miquilena, Rangel y los otros alumnos aventajados de Castro, hizo un comunicado para los círculos políticos de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) para convencer al pueblo de que podía recibir a los familiares, tan bondadosos y humanitarios ellos… Con esta medida lograron el censo más grande de cada vecino de cada casa o apartamento de cada una de las calles de La Habana, con datos sobre profesión, salario, religión, vinculaciones externas, etcétera. A través de la seudo libertad para recibir a la familia, ellos mismos suministraron la información para cerrar aún más los mecanismos de represión de la isla de la felicidad…
Chávez, en su retórica abundante, inconexa y abusiva, dijo: el neoliberalismo es el abismo. Y yo le digo a Chávez: No, el abismo eres tú.