Opinión Nacional

Energía nuclear en una Venezuela empobrecida

Iluso quien piense que la construcción de una central nuclear en Venezuela no será supervisada de alguna manera por el Gobierno de los Estados Unidos. Incluso, idealista si consideramos que el apoyo de Rusia no está condicionado a unas limitaciones y límites previamente acordados con la administración de Barack Obama. El gobierno venezolano esta al corriente sobre cómo se pactan estos planes de colaboración. Los ciudadanos sabemos que hay intereses económicos detrás de los acuerdos que no beneficiaran por igual a todos los venezolanos. La revolución es bonita; para quienes, al igual que otras épocas, están cerca del poder.

Pero, dejando al margen el debate ideológico con el cual el presidente Hugo Chávez nos quiere siempre desviar la atención, el proyecto es de interés para ambos países. Rusia obtiene un acuerdo importante en varias áreas y Venezuela pretende cubrir las necesidades futuras de generación de electricidad. Situación crítica; producto de su incompetencia.

Es inevitable plantearme las siguientes reflexiones sobre el acuerdo. La primera de ellas, ¿por qué acordar un proyecto de esta envergadura con Rusia? ¿Por qué no involucrar a Brasil que tiene experiencia en el uso de la energía nuclear? El segundo aspecto: ¿los venezolanos vamos a permitir sin más la construcción de una central nuclear en nuestro territorio? En los actuales momentos hay un debate en Europa sobre la conveniencia o no de estas construcciones para generar electricidad. Existen planes para el cierre de las centrales nucleares y la búsqueda de energías más seguras y económicas.

Finalmente, una central nuclear requiere de un proyecto consensuado. No es viable que el gobierno actual pretenda utilizar una construcción con estas características con fines bélicos; aunque ¿siempre estará Hugo Chávez en el poder? Pero, es un proyecto de alto impacto en el entorno donde se desarrolle y que incluye una tecnología de avanzada que debe considerar entre otros aspecto cómo nos vamos a deshacer de los desechos radiactivos peligrosos para la naturaleza y el ser humano.

El gobierno venezolano tiene un proyecto político desde su ideología; pero, carece de un proyecto de país que permita a los venezolanos, partidarios o no de su socialismo, avanzar hacia el futuro y mejorar su calidad de vida. La salud, la sanidad, la inseguridad, la pobreza, la educación siguen si ser prioritarios para la revolución bolivariana. Existirá una nueva composición en la Asamblea Nacional y esperamos que la misma asuma su responsabilidad antes los electores. Limitaciones y límites al presidente de la República es una de sus responsabilidades. Las decisiones con respecto al uso de la energía nuclear no puede ser potestad exclusiva del poder ejecutivo.

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