El Salto Ángel
En días pasados escribí para el grupo Retrospectiva de la Historia de Venezuela (Facebook) unos comentarios sobre el aventurero Jimmy Ángel y su relación con el gran salto de agua que conocemos como “Salto Ángel”. No es mi intención repetirlo y quien estuviese interesado en leer tan apasionante historia puede ingresar a esa modalidad de comunicación y leer los detalles del mismo. Lo que pretendo en esta ocasión es hacer ver lo apresurado de algunas decisiones que el Presidente Chávez decreta, aparentemente producto de la pasión y no de la razón.
Ocurrió este domingo. Imagino que en su “Aló Presidente”: Decretó, «no más Salto Ángel, ahora será Churún Merú» alegando que era el nombre con el cual los naturales de la zona denominaban la famosa caída de agua. No creo que los conocedores del asunto se carcajeasen irrespetuosamente de tales palabras. Claro, es posible que una tímida sonrisa se produjera en sus labios. ¿Y porqué tan tímida sonrisa? Muy simple: Churun Merú no es el Salto Ángel. Pero que esto no sonroje a nuestro Presidente. Hasta Renny Ottolina se equivocó cuando dio ese nombre a su famoso programa sobre el Salto Ángel. Menos mal que su hija (la del Presidente) María Gabriela le hizo saber sobre la equivocación y se dio a conocer el verdadero nombre indígena del salto: Kerepakupai Merú. Antes de continuar mis comentarios debo aclarar a mis lectores que el Churún Merú también existe, y conocido precisamente con ese nombre. Menos mal que el Presidente fue corregido a tiempo porque nos iba a bajar del primer lugar que ocupa el Salto Ángel con una altura de 908 m. y 807 m. de caída libre, al décimo octavo que ocupa el Churún Merú con unos 400 m, de caída. Y a propósito, después del Salto Ángel, en el ranking mundial que clasifica estos saltos de agua, ostentamos el segundo, tercer, cuarto y sexto lugar con saltos todos ubicados en la región de Canaima.
Tenemos un torbellino de decretos cambia nombres con la pretensión de cambiar la historia. Uno de los más recientes fue el del gobernador de Trujillo quien cambió el nombre de la biblioteca denominada Mario Briceño Iragorry por la del Coronel de la independencia conocido como “el diablo” Briceño. El uso de las atribuciones inherentes al cargo indudablemente le permiten hacer el cambio pero los argumentos que se esgrimieron en el decreto fueron verdaderas metidas de pata. Pero cabe hacerse una pregunta: ¿Cuál decreto “cambia nombres” ha tenido éxito? La actual avenida Presidente Medina de la caòtica Caracas se le sigue conociendo como Avenida Victoria y así inclusive está escrito en la ruta de los transportes de pasajeros. Se mantiene el nombre que se le colocó en honor al triunfo de los aliados en la segunda guerra mundial. Los barrios con nombres de personajes de la denominada “cuarta república” siguen siendo para la gran masa, Raúl Leoni, Doña Menca, Alicia Pietri y como sin dudas hay barrios con el nombre de miembros de este gobierno, así se denominaran “per sécula seculorum”. Una excepción fue el cambio del nombre del “23 de enero” que antes se denominaba “2 de diciembre” pero fue un nombre que no surgió por decreto sino por la voluntad de sus habitantes. Se ha pretendido cambiar el nombre del Pico del Águila en Mérida por el elegante nombre “El Collado del Cóndor”. Me vi obligado, en mi supina ignorancia a consultar el Larrouse para saber que significaba la palabra “collado” pero los sabihondos del cambio como que si ignoran que el cóndor, aunque más famoso que el águila, es un animal que come mortecina. Es una especie de zamuro grande. El águila en contraste, caza sus piezas en elegantes y precisas maniobras además de “no cazar moscas”. El cerro del Ávila, que debe su nombre a quienes fueron los propietarios de la mayor parte de su amplia extensión se le quiere denominar Guaraira Repano pero nadie lo denomina así. Seguirá siendo el Cerro El Avila. Porque si no, al maestro Cabré, conocido como el pintor del Ávila lo vamos a denominar el pintor del Guaraira Repano e Ilan Chester se va a tener que romper el cerebro para cambiar su canción Canto al Avila por Canto al Guaraira Repano. Les copio la letra e intenten el cambio en el coro. Se orinarán de la risa:
Voy de Petare rumbo a la Pastora
contemplando la montaña que decora a mi ciudad
llevando matices de la buena aurora
con la fauna y con la flora de un antaño sin igual
Y sabe Dios los pintores, las paletas, cuanta pluma del poeta
cuantos ojos encontraron un momento de solaz
y digo yo, vas regalándole al día
carga de buena energía
vas haciendo mas humano mi sentir y mi cantar
Coro:
Guaraira Repano . Guaraira Repano
Guaraira, Guaraira Repano ,
Guaraira, Guaraira Repano
Por último una sugerencia: Vamos a quitarle el nombre despectivo de Venezuela (algo similar a mujerzuela) impuesto por un extranjero a nuestro territorio para colocarle el nombre que nuestros indígenas dieron al territorio. Yo lo ignoro. Tal vez el pozo de cerebros del gobierno tenga la repuesta.