El que no la debe, no la teme

Enrique Viloria Vera25 marzo, 2010

No es un trabalenguas ni un ejercicio fonético, es simplemente la realidad impuesta por la Revolución Bolivariana que todo lo cambia a favor de sus más oscuros intereses. Así nadie puede estar seguro de que no será objeto de un hojillazo, de una lista, de una imputación, de una sentencia, de un llamado de auxilio a la corrupta e imperialista INTERPOL para una captura internacional, de un insulto del Primado o de una visita de los justicieros amigos del tribunal La Piedrita.

¡Nadie está a salvo!

si piensa distinto es traidor
si denuncia una injusticia es imputable
si vota en contra es desempleado en potencia
si no escucha la cadena es un apostata
si no se pone la franela roja es un oligarca
si marcha a favor de la oposición es gaseable con gas del bueno
si es fanático del Caracas es un vendido a la burguesía
si viaja al exterior es un vende patria
si compra un carro nuevo es un dispendioso
si se enferma es un suicida
si va a la playa es candidato a dengue
si come en el Simoncito es aspirante al Mal de Chagas
si pronuncia su Santo Nombre en vano llamándolo neo- dictador

¡Todos están a salvo!

si aplaude frenéticamente las ocurrencias del Líder
si el presupuesto de su organismo está al servicio del Partido con una ligera propina para su cuenta personal
si el arma que dispara y mata es de las rusas asignadas
si anda siempre engalanado con los colores de rigor y la cachucha en combinación
si de desgañita diciendo ¡Así! ¡Así!
si no está circunciso ni habla maracucho
si en cámaras afirma que ahora Venezuela es de todos (no de toditicos)
si cree en la honestidad de los duques y de las infantas del proceso
si cobra en cinco o seis misiones como buen revolucionario
si dice que Orteguita es buenmozo y el Obispo virgo.
si desea la inmortalidad para el que está mascando el agua del Caribe
si trafica, matraca, cobra comisión, acepta sobornos y promueve el chanchullo en nombre del proceso
si le reza en cualquier idioma aborigen a Santo Evito