El nuevo liderazgo
Siempre se habla de un nuevo liderazgo, de una posición emergente, de algo que no se parezca a lo existente, que no tenga que ver con lo que existe ni a lo que existió o viene del pasado.
La razón principal por la cual no se quiere al presente es por que se nos manipula seudo legalmente para llevarnos, sin nuestro consentimiento, a etapas superadas de la historia de la humanidad en condiciones de aplanar a la sociedad haciéndonos a todos pobres para garantizar una dependencia de un Estado totalitario enmascarado de protector cuando en realidad es depredador, corrupto y dictatorial, queriéndose parecer a las sociedades más atrasadas de la contemporaneidad tales como Cuba, Biafra, Irak, Libia, etc. Todo ello para mantener una sociedad de agradecidos por cada mendrugo que se recibe intencionadamente racionado. Los que conducen el presente viven una existencia regalada, llena de lujos, manejando en su provecho la riqueza que nos pertenece a todos por el solo hecho de ser venezolanos. Este presente acumula en su contra la mayor cantidad de delitos, de toda índole, que se hayan conocido en nuestra ensombrecida patria.
El pasado, y sus continuidades agazapadas, que nos condujo a una siempre creciente clase media, que consolidó libertades y derechos fundamentales, perdió el rumbo cuando centro su atención en sí mismos olvidándose de que el actor principal en un democracia es el pueblo a cuyas necesidades, siempre crecientes, hay que atender. Esa dirigencia se adoceno de tal manera que fue incapaz de defenderse de quien atacaba lo que se había logrado ante la actitud adormecida de un colectivo individualista por la falta de participación ante las pequeñas y grandes situaciones a las que se le daban soluciones desde las cúpulas dominantes. Las residuos de ese pasado de sanedrines que queda pretende continuar con el manejo cupular de las decisiones nombre de una fementida unidad que cuando fue producto del despertar de la sociedad fue abandonado ante los éxitos frustrados de las grandes manifestaciones y el referendo, convertido en plebiscito por arte de una justicia tarifada, cuyos verdaderos resultados se conocieron gracias a la última “torta” que apareció publicada por el mismo ente que produjo los mágicos resultados adversos a la expresada voluntad de las mayoría.
Entonces, lo nuevo es lo que no se parezca ni al pasado ni al presente. Una posición que se comprometa a luchar por garantizar una sociedad equilibrada por el bienestar de todos logrado en libertad, con reales oportunidades para la participación en las grandes decisiones, con poderes descentralizados cada vez mas cerca de los ciudadanos y con instituciones fuertes en permanente adaptación a las realidades del entorno. Procurando una correcta inversión de los recursos a los fines de generar una riqueza que nos toque a todos en equilibrada participación.
Por ese liderazgo emergente que atienda a las necesidades y búsquedas de la sociedad, estamos dispuestos a entregar lo mejor de nuestro esfuerzo. Por eso y por ti, te invitamos a luchar. Pero es ahora, si no es ahora no será nunca pues el despotismo se hará dueño de todo, si es que algo le queda por tomar. Si no lo hacemos ahora las cúpulas incompetentes de los politiqueros tradicionales pactaran para sobrevivir entregándonos a la voluntad voraz e incontrolable de quienes pretenden hacernos sus sumisos mendigos.
(*): Profesor Universitario. Asesor Empresarial