Crisis “Capitalista” Mundial No toca “Ni un Pelo” de las “Revoluciones” Pero Si sus “Marañas”
La tasa de inflación en Venezuela culminó el 31 de diciembre de 2008 en un 30,9 por ciento; por lo que el recién anunciado aumento del salario mínimo de 20 por ciento—en dos tramos; 10 por ciento en mayo y otro 10 por ciento en septiembre de 2009—no significará realmente un aumento de salario, sin una rebaja de salario de 10,9 por ciento con respecto al salario mínimo de 2008. Y ese salario se continuará erosionando a medida que aparezcan las cifras de inflación durante el año 2009 (que en enero y febrero, ya suman el 3,9 por ciento).
El aumento del IVA [Impuesto al Valor Agregado] desde un 9 por ciento, hasta un 12 por ciento, contribuirá a que la inflación durante 2009, aumente aún más por lo menos durante los primeros meses de su entrada en vigencia—y otro impulso adicional para que la inflación crezca durante 2009, lo constituirá la anunciada “priorización de las asignaciones de divisas” al cambio oficial [2,15 Bs.F. por Dólar], ya que en cristiano; eso quiere decir que se obligará a los importadores a acudir al mercado negro de divisas donde el precio del dólar es más del doble del precio oficial, y este aumento de los costos de importación será transferido a los precios; es decir, a la inflación.
Y otra medida anunciada ANTES del paquete “anti crisis” que también dará impulso a la inflación, fue el aumento del valor de la Unidad Tributaria desde 46 hasta 55 bolívares fuertes [un 19, 57 por ciento], ya que esto significa un aumento de una larga lista de impuestos, tasas y multas, que en no pocos casos serán transferidos a los precios, alimentado el crecimiento de la inflación.
La inflación también crece debido al llamado costo de reposición de inventarios, que en cristiano quiere decir que desde un bodeguero hasta una gigante compañía dueña de una cadena internacional de hyper mercados, saben que cuando se les acabe la mercancía que están vendiendo en este momento y deban comprar más de ella para abastecer la demanda, van a necesitar más dinero; porque la inflación ha hecho subir los precios de las mercancías que les suministran sus proveedores, y en consecuencia, le suben los precios a lo que están vendiendo actualmente, para poder comprar en el futuro nuevas cantidades de mercancías; es decir echándole más leña a la hoguera de la inflación.
Las mejores y más eficientes medidas para combatir a la inflación son dos: reducir el gasto público e incrementar la producción de bienes y servicios. El anuncio “anti crisis” del gobierno venezolano incluyó una de ellas: se reducirá el gasto público (el presupuesto nacional) en un 6,7 por ciento—desde 167,47 a 156,38 millardos de bolívares fuertes—pero no se mencionó ni una medida para estimular al sector privado a invertir para aumentar la producción, por lo que muy probablemente, el esfuerzo del gobierno para recortar el gasto público, difícilmente será suficiente para contener a la inflación.
Por ello, la “Crisis Capitalista Mundial” no tocará ni un pelo de las “Revoluciones”, pero sí a todas sus “Marañas” destinadas a hacer desaparecer al sector privado de la economía y a expandir al socialismo por el mundo—porque nada de eso es gratis; todo tiene un costo y un precio—y la inflación los hace aumentar constantemente.
Y la razón de esta cruda realidad es que todos los escritos sobre “economía” (muy entre comillas) que inventó Karl Heinrich Marx, y plasmó en los tres enormes mamotretos titulados en alemán: Das Kapital (El Capital), no son más que puras supercherías, y la única economía real que existe es la de libre mercado regulada por muy implacables leyes como la de la oferta y la demanda—como ha comprobado la OPEP al ver que el precio del barril de petróleo crudo continuó bajando aún después de haber recortado su producción en 4,3 millones de barriles diarios.