¿Crees que el infierno está quieto?
«De nada sirve ser un monstruo
si no se es también un teórico de lo monstruoso»
E.M. Cioran, El aciago demiurgo
(%=Image(4533955,»L»)%)El místico sueco (%=Link(«http://analitica.com/va/sociedad/archivo/8202839.asp»,»Emmanuel Swedenborg «)%), que abandonó las ciencias y los cargos públicos para recorrer los cielos e infiernos en compañía de demonios y ángeles, aseguraba que El Diablo es el infierno más profundo y no un líder particular o un Ángel caído. “Hay gobiernos en los infiernos, ya que si no los hubiera, no serían mantenidos los lazos de unión; pero los gobiernos de aquí son opuestos a los gobiernos de los Cielos. Todo aquí pertenece al amor de sí; aquí cada uno quiere mandar en los demás y tener supremacía sobre ellos. Sienten odio contra los que no les son favorables y ejercen venganzas contra ellos, los tratan con crueldad. He aquí por qué tienen por jefes a los que tienen más malicia y les obedecen por temor”. (Cielo e Infierno, núm 220)
No pocas veces la sospecha, búsqueda y denuncia de “el malo” deviene, torpemente, en una adoración negativa del mismo. El caso venezolano es paradigmático de “al amor de sí” arrojado por el místico tardío. Tanto los ejecutores de la revolución bolivariana como sus opositores buscan la certificación mediática de sus posiciones, que se valida con ovaciones y rechazos callejeros. Se ha desplegado un show dramático de egos que gira lejos, lejísimo, de las socavadas condiciones humanas de los habitantes del país para quienes la revolución se manifiesta en su vida neorecolectora.
La maldad está en constante movimiento y mutación. Algunos moralistas aconsejan ser vigilantes hasta de uno mismo, no sea que el más desprevenido gesto nuestro ocasione un ciclón en casa del vecino. Así, no es recomendable cruzar la democracia mirando sólo a la izquierda, pues ya hemos sido atropellados (¿recuerdan el golpe del 11-4?) por vehículos fantasmas que venían de la derecha. Ya que no podemos ser, por ahora, artífices de nuestro destino, seamos buenos peatones del mismo y desconfiemos de los estresados conductores de los diversos aparatos políticos. En estos días de recolección y selva desatada (100 muertes cada fin de semana atestiguan esta “suspensión de la civilización” que vivimos en Venezuela) es prudente cuidarse de los otros lobos y conjurar sólo con pares de manada.
EL maniqueísmo de clan no es eficaz, ya que cada día son más los revolucionaros que devienen en “contra” y, paralelamente, el gobierno recibe apócrifos apoyos de agendas ávidas de petrodólares. No obstante, el mapa de nuestro aciago existir se escribe desde las equivocaciones de los unos y los otros: errores de transmisión en un desfile clave; lanzamientos presidenciales a destiempo, bajo la superstición de que la provincia compra todo lo que viene de la Gran Caracas; desenfrenadas posiciones en pantalla que ocultan un (%=Link(«http://aporrea.org/dameverbo.php?docid=7356″,»desprecio compulsivo»)%) por todos ; constante alimentación y frustración de las expectativas del colectivo con metas imposibles a corto plazo, desde viviendas-oficialismo hasta renuncia del Presidente con el fallido paro-oposición y un referéndum que muchos evaden ante la fiesta de las elecciones de alcaldes y gobernadores. El listado no es exhaustivo, ya que cada lector debe agregar los microatropellos que ha sufrido (desde una tranca vial no avisada de sesenta minutos hasta las delirantes cadenas presidenciales en los prime time televisivos) por estos clanes empecinados en el “amor de sí”. Podría pensarse que gobierno y oposición son máquinas lógicas conectadas a una interfaz equivocada.
Tejer un impulso vital lejos de las miopías de las facciones en pugna y reconocer nuestra nueva condición recolectora, donde cada día somos más nómadas, animistas (compras de (%=Link(«http://www.loteriadeltachira.com/»,»KINO»)%) y una fe secreta en el que dólar no alcanzará los 3000 bolívares por unidad) y (%=Link(«http://www.eluniversal.com/2002/07/29/OPI7.shtml»,»cazadores de tigres»)%) ; es un requisito ineludible para sobrevivir. Otros sencillamente se apagan por la vía del infarto o el suicidio y los más religiosos sueñan con la implacable aplicación del (%=Link(«http://www.meta-religion.com/Religiones_del_mundo/Cristianismo/Otros_Libros/evangelio_de_valentino27_63.htm»,»Evangelio de Valentino»)%) , donde Jesús relata insondables tormentos al ladrón por sus faltas “Y vendrá Jaluham, y le dará el cáliz del olvido, y le hará olvidar cuanto ha visto, y entrará en el cuerpo de un cojo, ciego y lisiado. Y éste es el castigo de un ladrón”.