Club de superioridad inmoral
Existen fuertes indicios de que la “revolución bolivariana” puede ser derrotada electoralmente el 3 de diciembre. El desenlace para que esto ocurra con la entrega del poder de manera pacífica y constitucional se encuentra lleno de incertidumbres. El escenario que más se maneja a nivel del juicio popular y silvestre es que de darse el evento- si es que no lo confiscan antes- y ser vencidos “los revolucionarios”, estos se excusarán en cualquier cosa, en la invención de una extravagante coartada o en el fraude, si fuera necesario. El que puedan salirse con la suya de darse esta hipótesis luego que se produzca, como es de preverse, incitará a una rebelión popular y una crisis institucional de vastas proporciones, lo que frustrará, quizás, el que puedan lograrlo.
Lo que aferrará en el poder a los “bolivarianos está ligado, al menos, a dos asuntos fundamentales: el primero de ellos vinculado a la percepción que poseen de si mismos de una pretendida superioridad moral, autodefinición que les sirve además para justificar ante su buena conciencia las triquiñuelas y costos de violencia al que echarán mano sin remordimientos y el segundo, el temor de que serán perseguidos y probablemente juzgados, mucho menos que por corrupción, por crímenes y violación continuada y sistemática de derechos humanos.
En relación al sentimiento de superioridad moral, el presidente Bush, quien ha argumentado a los modos del nuestro” que la verdad moral -aquélla en la que él se reconoce- es universal. Es decir, en el ejemplo del norteamericano, Estados Unidos encarna, y defiende, el Bien y sus adversarios el Mal”. El que sea juzgado el presidente de los EU es una probabilidad remota y por eso injusta, pero lo que no hay duda es que califica con méritos para integrar el club de aquellos que subvierten las reglas de la comunidad internacional. Ha sido obvio que la estrategia de respuesta a la amenaza que supone el terrorismo, no sólo ha estado equivocada sino que ha arrastrado inequívoca un desempeño criminal.
¿Pero es excusa esta para coincidir y apuntalar el terrorismo? Es imposible gagear en el sentido que para el presidente Chávez y el sector mas intenso que lo acompaña ,como miembros ilustres de los extremistas de la izquierda enferma, se suscriben a las tesis de que el terrorismo islámico para ellos no es tal, sino una legitima manifestación de la resistencia; las brutales prácticas musulmanas contra las mujeres son a sus «compasivas miradas» expresiones de la diversidad cultural; la chifladura norcoreana, que mientras mata de hambre a su pueblo fabrica armas atómicas, es heroica resistencia a la agresión imperialista. Y la Cuba martirizada por casi 5 décadas, un estandarte de dignidad y sacrificio heroico. Ese razonamiento es en esencia la nuez de la teología “bolivariana”.
La visita, acuerdos y alianzas con Ahmedineyad, el querubín que le faltaba a nuestro líder mundial para pegarlo a su álbum de ilustrados acompañantes de terroristas fanatizados, complicará aún más la defensa de su ya abundante y vergonzosa conducta al comparecer ante el Tribunal Penal Internacional. Y por cierto, que no se le ocurra llevar al tal Amundaraín para defenderlo, lo hundirá hasta los huesos, ahí este indigno bate quebrado, no lleva ni un mínimo chancesito.