Chávez y Allende
Cuando el comunista Salvador Allende gana las elecciones y decide que él recibió un mandato de llevar a Chile al mar de la felicidad de Cuba y procedió a destruir el país, la gran mayoría de los chilenos, civiles y militares, se dieron cuenta que se habían equivocado y que si se quería salvarla patria, el proyecto de Allende debía ser detenido. Cuando éste está a punto de ser hecho preso, se retira con sus guardaespaldas cubanos a una habitación, se escucha un disparo y salen los cubanos y declaran que el presidente se suicidó. En otras palabras, antes de permitir que Allende se convirtiera en un prisionero, símbolo y punto de referencia de las izquierdas del mundo, Castro prefirió convertirlo en una «franela» al igual que el «Che».
En Venezuela, tenemos una situación similar, donde un presidente democráticamente electo en 1998 toma la decisión de llevar al país al comunismo totalitario y demuestra que ese fue siempre su plan aun antes de las asonadas de 1992. La gran mayoría de los venezolanos no quieren el comunismo, pues ellos no votaron por eso. Chávez para protegerse se rodea de cubanos que lo cuidan, lo alimentan y le dan cuidados médicos. Lo que quiere decir que Chávez es prisionero de los Castro y la resolución de nuestra aterradora situación nacional, pasa por La Habana.
Siguiendo el guión del foro de Sao Paulo y tratando de proteger a su pupilo favorito, Lula sale a decirle al mundo que Chávez es un demócrata, yo solo le preguntaría a Lula ¿qué hubiese pasado en Brasil si él hubiese tratado de implantar el mismo régimen que Chávez? Pues muy simple, ya lo habrían sacado a patadas. Lula con esa declaración, devela su verdadera catadura y se prepara a recibir los beneficios cuando deje el gobierno. ¡Será!
