¿Américo Martín y Freddy Muñoz, no tendrán nada más qué hacer?
1. En editorial de Analítica de fecha 18 del corriente se lee lo
siguiente:
“La facilidad con que los miembros del PSUV se pasan al PPT… hace pensar en… una estrategia parecida a la que, en su tiempo, seutilizó con el dócil Arias Cárdenas”
También dice que esa estrategia podría servir para
“La creación de un tercer frente que capte el descontento… pero que no sume votos a la oposición”
En eso consiste el editorial. Muy breve. Y termina así:
“¿No les parece, amigos lectores, que este ejercicio de ficción política pueda tener algo de realidad?
2. Lo antes transcrito probablemente está en la mente de cada venezolano y el Editorial pudo haber pasado sin hacer muchas olas (aunque, sí, mucho efecto).
3. Martín y Muñoz tienen periodicidad como los cometas. A veces publican artículos por un tiempo y luego desaparecen. Es curioso que dicho Editorial les sirva de pretexto para hacer su reaparición.
4. Martín publicó un escrito de fecha 22 del corriente titulado «El miedo al miedo» en el cual manifiesta que discrepa del Editorial y dice:
“Si nos abalanzáramos contra Falcón, centro de la principal crisis interna del chavismo, estaríamos sirviéndole inocentemente al caudillo en su ofensiva por contener efectos sismáticos.”
Ese es el nudo del escrito. El editorial no menciona a Falcón.
5. Hoy 30 de marzo Muñoz publica el artículo «Refutación a Américo Martín» en el que dice que el autor del Editorial. “Se equivocó al emitir un precipitado juicio especulativo
sobre los efectos de la deserción de Henry Falcón”
El Editorial no menciona a Falcón ni se refiere a los efectos de la deserción de Falcón, porque el editorial No asume la deserción de Falcón. El Editorial asume -eso sí- el engaño, la farsa de quienes aparentan pasarse a la oposición.
6. Y cabe preguntar: ¿Quién es Falcón? El propio Muñoz responde en su artículo al decir que Falcón
“Al retirarse del partido oficial buscó el cobijo del PPT, el más servil de todos… para seguir siendo una figura prominente del chavismo”
En vista de que Martin se refiere a los disidentes, Muñoz le reprocha diciéndole que son «opositores» y con ello -tal vez sin querer- abre un tema que sin la menor duda es de suma importancia: Disidente vs. opositor.
8. El disidente expresa desacuerdo pero no necesariamente se convierte en opositor. Esto hay que saberlo entender porque está en la médula de la tradicional actitud de los marxistas venezolanos de hoy. Tal vez todos estos marxistas apoyan al tipo de régimen que mandonea a Venezuela, porque puede garantizar -a largo plazo- el logro de objetivos marxistas. Al apoyar al régimen, cada marxista se convierte en disidente de hecho cuando se aparte del partido oficial.
Los marxistas que abiertamente se OPONGAN DE VERDAD al régimen ya dejan de ser marxistas. ¿Cuáles marxistas son opositores?
9. La respuesta es clave para entender lo que hay detrás del uso que Martin y Muñoz hacen de las palabras «disidencia» y «oposición» y tal como los veo a ellos en sus escritos- ninguno es claro. Pero es indudable que ambos han sido marxistas y no es cierto que los adecos
mueren adecos, pero los marxistas SI (sin el prefijo ade).
10. Quienes no sean marxistas y lean el Editorial podrán caer en cuenta de que el antecedente Arias Cárdenas puede repetirse y por tanto hay que actuar en concordancia. Quienes sean marxistas y no lean el editorial siempre van a tener en mente que dicho antecedente debe ensayarse otra vez.
11. No es pura coincidencia que todos los marxistas que publican artículos en Venezuela al referirse al régimen digan «régimen militar-civil» en vez de decir «régimen de militares y civiles
marxistas» porque debe serles muy desagradable el autoataque (además de que consideran que los venezolanos somos estúpidos).
12. Y volviendo al título de este escrito, Martin y Muñoz no pueden hacer algo más grave en contra de la democracia venezolana que lo que hacen mediante sus escritos como los aquí mencionados, que tratan de quitarle la genuina validez al toque de alarma -totalmente justificado- que hace el referido editorial de Analítica. Siendo ellos o no siendo ellos demócratas, disientan o no del chavismo, se opongan o no al chavismo, ellos -solo ellos- lo saben. Yo -en sus artículos- no lo puedo adivinar. Escrito y enviado el 30 de marzo de 2010.-
