A votar, a votar que el mundo se va a acabar
E ste dicho no es exactamente fiel a su original, pero para nuestros propósitos queda perfecto. En esta pequeña disertación, con esguinces de cotilleo, voy a mencionar (el pecado y no el pecador) algunas de las ideas que he oído los últimos días. Como siempre, hay de todo como en botica.
1) Avezados analistas pensaban que en los estados Carabobo, Táchira, Mérida y Zulia los candidatos a gobernadores y los principales partidos de esas regiones obtendrían más votos (el 16-D) que Henrique Capriles (el 7-O). Pues, amigos, se equivocaron, en las elecciones a gobernadores la votación cayó vertiginosamente, y se demostró de alguna manera que la candidatura de Capriles es una magnífica opción y goza de la mayor aceptación. Saca más votos.
2) Hay que lograr en lo inmediato un consenso (ojalá sea mañana, 29-01-2013) para designar a Capriles Radonski candidato presidencial, visto que Maduro, el candidato del Gobierno, lleva 12 actos de campaña y nosotros ni uno.
Maduro actúa como Presidente y no lo es, y como candidato y tampoco lo es. Una trampilla más del chavismo.
3) El chavismo obtuvo el 7-O 8.200.000 votos y nosotros 6.750.000. Diferencia, 1.450.000. El 16-D fueron 4.600.000 versus 3.750.000; diferencia, 850.000 votos. Ellos perdieron 3.600.000 y nosotros 3.000.000 de votos.
4) Los 6.750.000 votos eran de Capriles y los puede reconquistar con cierta facilidad. Los 8.200.000 votos eran de Chávez y no le será fácil a Maduro reconquistarlos. Creo que necesitan tiempo. Estoy convencido de que andan jugando al diferimiento. Si es cierto que Chávez es un candidato fuera de serie, Maduro no lo es. Esos ministros y gobernadores cargan con el peso de la ineficiencia y la responsabilidad de los errores del Gobierno: inflación, inseguridad, escasez, etc.
5) Maduro puede recuperar, en el mejor de los casos, 50% de los votos perdidos para alcanzar la cifra de 6.400.000.
Henrique puede alcanzar su misma cifra, 6.750.000, o quizás un poco más, hasta los 7.000.000. La victoria es altamente probable. Es evidente que Maduro ha resultado una copia mala, pobre y disminuida de su jefe. Mimetizarse con Chávez ofendiendo a la oposición y diciendo que hay una conspiración para asesinarlo es prueba de su poca iniciativa.
6) Hay que estructurar de inmediato un comando de campaña de políticos experimentados y acendrados en contiendas electorales y arrancar la competencia de alcaldes y de refilón la presidencial.
7) Varios de los candidatos a gobernadores que no resultaron elegidos serían magníficos alcaldes. No hay que tener temor de evaluar esos casos.
8) Debemos hacer un acto nacional en pocos días (1° de febrero) y concentrar todos nuestros candidatos a alcaldes como primer acto electoral. El Gobierno no tiene candidatos y quieren unas primarias donde la alianza Maduro-Jaua-DaríoCilia-Khan-Giordani-Navarro quiere liquidar a sus contendores Diosdado-AmeliachBernal-Arias.
9) La dupleta Henrique Capriles y Henri Falcón es de alto impacto electoral. Tienen las mejores credenciales para gobernar. La figura exitosa de Henri Falcón debe jugar un papel más importante. Ha salido, al igual que Henrique, victorioso en cuatro elecciones. Dos de alcalde y dos de gobernador. Henri lo ha hecho tanto en las filas del chavismo como en las filas de la oposición.
Los electores en todo el país lo aprecian.
10) Escoger los mejores voceros y especializarlos. Como en el fútbol, un marcaje hombre a hombre. Tomar la ofensiva.
11) No olvidar el asunto de la elección de siete magistrados del TSJ, el contralor y tres miembros del CNE.
12) Denunciar el «paquetazo rojo» en la economía.
Hasta aquí me trajo el río. Seguiremos informando.