La papa caliente de Merkel
Los europeos se congratularon de que Alemania pusiese fin el pasado lunes a la incertidumbre política que reinaba en el país desde las elecciones del 18 de septiembre. Alemania es el pais mas grande de la Union Europea y la situación de indefinición en su política interna mantenía en vilo a toda la comunidad.
Una vez que el Bundestag lo confirme, Angela Merkel, la presidenta de la Unión Cristiano Demócrata de Alemania se convertirá en la primera mujer en ocupar el importante cargo de Canciller de su país. El camino de Merkel estará sembrado de escollos toda vez que para obtener el acuerdo de Gerard Schroder a su ascenso a la jefatura del gobierno, debió efectuar grandes concesiones al Partido Socialdemócrata (SPD), su principal opositor, quien se convierte a partir de ahora en su socio en el gobierno.
En las elecciones parlamentarias el partido de la ahora cancillera apenas había alcanzado aventajar a los adeptos de Schroder en 4 escaños. Desde entonces el país entró en una peligrosa etapa de parálisis política mientras entre socialdemócratas y democristianos se decidía como se conformaría un gobierno representativo de ambas tendencias. El antiguo Canciller se salió con la suya al ceder la cabeza del gobierno a Merkel y poner en sus manos una verdadera papa caliente ya que conservó para su partido tres de las cuatro mas importantes carteras ministeriales: Relaciones Exteriores, Finanzas y Justicia.
Dentro del paquete que hereda la politica de 51 años, las dificultades no van a ser pocas. Alemania deberá renunciar a tener un gobierno fuerte y estable debido a la continua diatriba que generará la coalición , pero con una votación tan reñida como la que protagonizaron los alemanes las cosas no podían haber sido de otro modo. Los asuntos externos serán particularmente reñidos: por ejemplo el apoyo de Alemania a las políticas estadounidenses estarán permanentemente en juego ya que mientras Merkel es una decidida aliada de Bush, los socialdemócratas, que cuentan en su haber con el Ministerio de Exterior, han sido tradicionalmente hostiles al poderío norteamericano. En el terreno económico, en el que ambos acuerdan importancia a una profunda reforma, las posiciones en cuanto a los medios y los tiempos para su ejecución son profundamente distantes
Asi las cosas Merkel es mujer de retos y ha demostrado tener la estatura necesaria para negociar situaciones en extremo espinosas. Esa será pues la tónica de la Alemania que le tocará gobernar, una en la que todo, absolutamente todo será objeto de una constante negociación.
