La inoportuna aspiración de Venezuela al Consejo de Seguridad
Se ha señalado que la aspiración de Venezuela al Consejo de Seguridad de la ONU es inoportuna, por el hecho de mantener relaciones enfrentadas con varios países del hemisferio como Estados Unidos, México, Perú, Panamá para solo mencionar algunos de los multiples países con los que tenemos una confrontación permanente
Se destaca igualmente que la representación diplomática en la ONU no está en condiciones de dar una respuesta profesional, ya que la opción política de la actual diplomacia Bolivariana, ha privado a la Misión Permanente de diplomáticos de carrera, sin los cuales no se puede contribuir eficazmente en el cumplimiento de la exigente agenda diaria.
También se ha afirmado que Venezuela no es representativa hoy de las posiciones de la comunidad democrática de naciones latinoamericanas, debido a las recientes modalidades en las que nuestra política internacional se inclina preferentemente en asumir posiciones al lado de Iran, Cuba, Corea del Norte o Siria
No deja de tener fuerza el argumento de que al asumir posiciones improvisadas como el voto solitario en el caso de Irán, o el rechazo del consenso de 191 países que apoyaron los resultados de años de arduas negociaciones para aprobar la requerida Reforma de la ONU, muestra que carecemos de capacidad para aportar formulas de consenso, conciliación y tolerancia, elementos claves para el mantenimiento de la paz en el mundo –reto fundamental del Consejo de Seguridad
La preocupación por que se repitan posiciones como las que permanentemente se reproducen de desequilibrar las relaciones entre paises del hemisferio como cuando se enfrentaron las relaciones Chileno-Bolivianas por el deseo de nuestro Jefe de Estado de bañarse en aguas maritimas bolivianas, o el de agitar a los argentinos con el delicado tema de las Malvinas, unido a la receptividad manifestada con el Hamas, el Iran y Cuba son vistas por muchos países como un elemento desestabilizador en la región.
Pero además de esos argumentos, es necesario ponerle un freno a la exclusividad que han venido asumiendo los países de América del Sur al impedir que se cumpla el principio de rotación sub-regional. Argentina y Perú representan a América Latina en el Consejo de Seguridad mientras que en los años anteriores han estado en años sucesivos Brasil, México, Colombia y Chile. ¿Cuando le tocará a América Central?.
En vez de procurar el respaldo del GRULAC, nuestro Vice Canciller para el Africa anuncia con mucho entusiasmo que tiene el respaldo de la Unión Africana desde Adis Abeba. No hubiera sido mejor contar con el respaldo de América Latina?
Guatemala en vez de procurar su respaldo en Africa, Asia, o el Medio Oriente ha presentado ya hace mucho tiempo su candidatura con el apoyo de los países centro-americanos. No es esa via más indicada?