La agenda de Santa Marta
Un aforismo francés afirma que “Todo lo que termina bien, esta bien”. Por ello sentimos agrado al constatar que las amenazas contra Colombia se sustituyeron por palabras de paz y amor, apoyadas por una cadena humana del PSUV dispuesta a demostrar el nuevo espíritu de fraternidad Bolivariana.
A pesar de lo positivo que es constatar ese cambio repentino, las relaciones entre dos Estados no pueden depender del temperamento del momento, sino basarse en los intereses de Estado. En otras palabras, esta bien la decisión de pasar la pagina, pero hubiera sido conveniente dar un paso adicional para escribir en esa nueva página en blanco, los temas que interesan a los diversos sectores venezolanos.
Los Acuerdos de Santa Marta muestran la habilidad diplomática del Palacio de San Carlos, pues han sabido colocar en la mesa de discusiones los temas de la agenda Colombiana, frente a una contraparte que demostró la improvisación y la ausencia de una agenda diplomática concreta.
Para definir los intereses de los venezolanos, además de la posición oficial, se debe consultar la posición de los empresarios de Fedecamaras, de los trabajadores, de los ganaderos, de los gobernadores y alcaldes fronterizos, de los partidos que tendremos diputados a partir del 26 de Septiembre. Pero ese mecanismo de consultas no existe en la actual práctica “diplomática” bolivariana, ya que considera “apatridas” a los que no estén con el Gobierno y los negociadores no tienen argumentos para defender los intereses reales de Venezuela.
La diplomacia Neo Granadina –por el contrario- incorporó en la Declaración de Santa Marta los Principios y los Mecanismos de Cooperación que recogen los temas centrales de sus intereses: reestablecimiento de relaciones diplomáticas, descongelación de las relaciones comerciales, pago de la deuda a los exportadores Colombianos, prolongación del Acuerdo de complementación económica de la CAN, inversiones sociales en la frontera y de manera especial el tema central de la reciente disputa: tratar el tema de la seguridad fronteriza y en especial definir el rechazo a las FARC, y aceptar la soberanía Colombiana en el Acuerdo militar con Estados Unidos.
Para asegurar que se cumplan estos acuerdos, se establecieron cinco comisiones que permitirán concretar el dialogo e identificar soluciones. La Canciller Holguin viene esta semana a Caracas. También lo hará el Presidente del Senado Armando Benedetti. La Agenda se concreta