Fraude: nuevas pruebas
Como si no fuera poco con cuanto sucede en la campaña electoral, que presenta una recta alfombrada para el ilegal candidato-presidente y un camino torcido y sembrado de obstáculos para los restantes candidatos, no pasa día sin que surjan nuevas evidencias de la tramposa actuación del oficialismo y sus organismos electorales digitados.
Es cuanto cabe concluir de dos graves denuncias surgidas el día de ayer, la primera presentada por el movimiento Somos Perú respecto de la presencia de casi cuatro mil miembros de la PNP en el padrón electoral; la segunda por la unidad de investigación del diario El Comercio, que ha puesto al descubierto una verdadera «fàbrica» ilegal de invención de firmas en favor del movimiento Perú 2000.
Comenzando por la primera, denunciada por el candidato Alberto Andrade y su estado mayor político, hay que decir que sus datos son precisos y se basan en un cruce de información efectuado entre los padrones entregados por el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) a los partidos políticos y la planilla de pagos de la Policía Nacional.
Fluye de esta operación que 3,897 efectivos policiales en actividad se encuentran habilitados irregularmente para votar el 9 de abril, de los cuales 198 han sido elegidos miembros de mesa. Casi las dos terceras partes de estos policías posee libreta electoral, pero 1,612 de ellos la han canjeado por el D.N.I. lo cual evidencia acción reciente y debilita el argumento de que la situación data de la guerra interna.
La información hecha pública por Somos Perú no admite dudas. Ha sido incluso desglosada por departamentos y por grados. Ha sido comprobada con meticulosidad para excluir los casos de homonimia y descubre que casi tres mil de los miembros de la PNP documentados son suboficiales y los restantes oficiales, algunos de ellos de alta graduación.
Una vez más es el señor Celedonio Méndez, jefe del Reniec, quien queda bajo responsabilidad, pues él mismo se había encargado de anunciar que se había procedido descargar a todos los uniformados en actividad del padrón electoral. Ahora debe una explicación a la opinión pública (otra más), pues la operación de cruce de datos efectuada por Somos Perú es de las más simples y asombra que los funcionarios del Reniec no la hayan hecho.
El doctor Andrade ha anunciado que procederá a realizar el mismo cruce de datos entre el padrón y la relación de miembros en actividad de las Fuerzas Armadas, ya que si en la PNP se han descubierto 4000 miembros que podían votar todo el trabajo del Reniec ha quedado bajo sospecha y requiere de ser investigado. Los datos obtenidos serán entregados a la Defensoría del Pueblo, a la Asociación Transparencia y al propio JNE, quien ha anunciado que procederá, como manda la ley, a descargar a estos efectivos en actividad del padrón electoral, una vez hechas las comprobaciones del caso.
La denuncia publicada ayer en El Comercio es igualmente grave. Una excelente indagación de la unidad de investigación del Diario Decano ha logrado acumular indicios suficientes como para denunciar una gigantesca operación de falsificación de firmas en la agrupación oficialista Perú 2000, la cual presentó más de dos millones de adherentes al momento de su inscripción.
De acuerdo a la investigacion realizada, Perú 2000 habría obtenido copia de los padrones de adherentes presentados con ocasión de la últimas elecciones municipales por distintas agrupaciones políticas y con ellos montó una «fábrica» de falsificación en Bellavista, en la que un equipo de varias decenas de personas procedió durante varios meses a copiar nombres, números de libretas electorales y firmas en beneficio de Perú 2000.
Esta «industria del delito» explica que en apenas un mes, y en entregas regulares que bordeaban las 50,000 firmas cada vez, Perú 2000 llegara a la impresionante cantidad de un millón de firmas. Claro, se trataba de adherentes que no habían sido inventados (puesto que existen y sus datos son correctos), pero que eran falsos por cuanto jamás fueron abordados ni firmaron en favor del mencionado movimiento. La denuncia abarca nombres de gente cercana a Absalón Vásquez y al congresista-notario Oscar Medelius, ya implicado en una maniobra similar contra el referéndum.
Puede parecer extraño que el oficialismo, con tres agrupaciones inscritas (Cambio 90, Nueva Mayoría y Vamos Vecino) recurra a estos métodos, pero hay que tener en cuenta el golpe publicitario causado, además que se trataba de la entronización de Absalón Vásquez como nuevo líder del fujimorismo y no por azar titular de su lista al Congreso.
Fallecidos y uniformados en el padrón, un gigantesco fraude en la base de la inscripción de Perú 2000. El fujimorismo quiere ganar recurriendo a cualquier trampa. Pero los peruanos no somos tan intonsos como creen. Que caiga sobre ellos el peso de la ley y la sanción de las urnas.