Estatización gradual de la banca
La nueva Ley de Servicios Financieros impulsada por el Movimiento Al Socialismo pone al sistema bancario bajo estrecha dirección gubernamental, en una medida que, de acuerdo a un reciente estudio de la Fundación Milenio, podría ser un paso hacia la estatización gradual de la banca.
“Si el gobierno no es presa de una confusión de conceptos, querría decir que tiene la voluntad de reducir las dimensiones del sistema financiero privado o ir sustituyéndolo paulatinamente por bancos estatales; un proceso más lento pero idéntico al planteado en la amenaza del Ministro de Economía: la nacionalización (léase estatización) de la banca”, señala el documento del citado think tank.
Los instrumentos para la reducción de la banca privada son, básicamente: 1) la fijación de las tasas de interés desde el ministerio que conduce Luis Arce Catacora (foto), y 2) el direccionamiento estatal del crédito al sector productivo.
Estamos ante un giro fuertemente dirigista respecto a la política bancaria. A semejanza de lo hecho en el rubro hidrocarburífero, donde las petroleras pasaron a ser simples operadoras del Estado, los bancos privados quedarían reducidos a una condición similar.
Con los dos puntos mencionados arriba, se busca alinear al sistema financiero en los objetivos populistas de la administración de Evo Morales, canalizando fondos hacia las bases electorales del partido de gobierno en momentos en que el país se encamina hacia los comicios del 2014.
Por supuesto, prebendalizar el sistema financiero es una medida que a mediano plazo tendrá consecuencias negativas, al colocar los depósitos de los ahorristas según un criterio político, lo que equivale a decir que podrían ir a parar a prestatarios sin capacidad real de repago de su deuda.
Pero el mediano y el largo plazo no son cosa que le interesen al populismo, cuyo horizonte apenas llega hasta el próximo proceso electoral…