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¡No se equivoquen!

A continuación una arenga de Tareck El Aissami, Gobernador del Estado Aragua:

“…no le vamos a dar chance…y nosotros aquí vamos hacer igual… no darle chance. Cuando ellos se instalen… ¿Eso es el cinco de enero?… Pero desde ya tenemos que prepararnos para llegarles en cambote allá, con el pueblo. Hay que comenzar a reorganizarnos, esto implica un combate de pueblo. Fíjense que el 13 de abril fue el milagro perfecto y salió el pueblo”.

A las claras, el gobernador El Aissami está incitando a una rebelión popular. Por muchísimo menos está preso Leopoldo López. El Aissami está llamando a un “combate”. Está llamando a sabotear la instalación de la nueva Asamblea Nacional. Con ese llamado El Aissami está desconociendo el resultado electoral del 6 de diciembre. Tanto documento que se pretendía que se firmase para respetar el resultado electoral -no sé si lo firmó el gobernador de marras- y con esta arenga está dándole la espalda, precisamente, a la voluntad popular. El discurso de este gobernador es sumamente grave. Está incitando a la revuelta, al caos. Está incitando a la violencia. El uso la palabra “combate” solo tiene una acepción. ¿Qué se pretende?

El General Jorge Luis García Carneiro, quien como El Aissami en Aragua también salió con las tablas en la cabeza en Vargas, está en la misma onda. Leo en El Nacional: “Pidió a los militantes del Psuv y simpatizantes ir el 5 de enero “como fuera” a la Asamblea Nacional”.

Lo que más indigna y preocupa de este tipo de declaraciones es que hablan del “combate del pueblo”, y no terminan de entender que la voluntad manifestada el 6 de diciembre fue del pueblo. El pueblo fue el que precisamente habló y dio su dictamen. Ahora bien, ¿cuánto poder de convocatoria pueden tener el General García Carneiro y Tareck El Aissami? Según los resultados electorales, cero (0). Porque tanto el Estado Aragua como el Vargas, ambos de mucha raigambre  chavista, fueron escenarios de grandes sorpresas electorales. Y la derrota política de estos dos gobernadores ahora la quieren traducir en una revancha inaceptable con estos llamados al caos y a la violencia en las calles.

Otros gobernadores oficialistas reaccionan de manera distinta. Llama la atención, por ejemplo, el caso de Aristóbulo Istúriz, en Anzoátegui. Leo en El Tiempo, en Puerto La Cruz: “Se va la revolución si no se ataca el problema económico”. Aquí ya se apunta para otro lado. “En la sesión realizada en el Consejo Legislativo para aprobar el presupuesto de la gobernación para el 2016, el mandatario de Anzoátegui aseguró que la producción de alimentos será una prioridad. (¡Bingo!) Ello incluye la inversión en plantas y fábricas que están a media máquina para que funcionen al máximo y pasen a manos del poder popular”.

¡Dale con el poder popular! Lo que está claro, Istúriz, es que el “poder popular” no es el poder del pueblo sino el de una camarilla, no precisamente transparente en el manejo de los dineros públicos.

Recientemente estuvo en el programa el periodista Víctor Salmerón, quien hizo el inventario completo de la cantidad de empresas en el sector alimentos manejadas por el gobierno, cuyas marcas no están en los anaqueles. De manera que lo que hay que hacer es ponerlas a producir, y no mandarlas a ningún “poder popular” de la camarilla en cuestión.

Los dirigentes chavistas, por lo visto, reaccionan de la misma manera: desconociendo la voluntad popular.

Otros dirigentes de menor jerarquía, sin embargo, están en otra tónica. Leo en Sunoticiero.com: A través de su programa La Fuerza es la Unión, transmitido por Periscope, el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús “Chúo” Torrealba, manifestó que el “verdadero” contendor del gobierno no es la oposición, ni los 112 diputados para la AN, es Oswaldo Rivero, alias “Cabeza e Mango”, la estrella de los programas anti-opositores del canal 8.

El opositor detalló que luego de escuchar las palabras de “Cabeza e Mango”, en las que repudió que la derrota del chavismo fuera por culpa de chavistas, afirmó que él es el “verdadero contendor de Nicolás Maduro”. Así lo publicó Diario2001.

“El señor de apellido Rivero, que era el ancla de Zurda Konducta, apareció en un video desde Miraflores, desde el mismo camión donde se había parado Maduro, diciendo: ‘¿Cómo es eso que ahora el culpable de la derrota es el pueblo, que el culpable del desastre electoral es el pueblo?, ¿es que van a hacer un congreso del PSUV para analizar la derrota desde El Alba con los mismos 10 hombres de siempre? ¿Los que tienen contratos con el gobierno?”.

Así van las cosas. Discursos, arengas, desplantes, mucho desconcierto y mucha prepotencia. Señores El Aissami y García Carneiro, si algo quedó en evidencia el pasado 6 de diciembre es que el venezolano quiere democracia, paz y concordia. ¡No se equivoquen!

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