No es el fin
Aunque parezcas desmayar y perder la fuerza, aunque te digas que no vale pena luchar, aunque la frustración te arranque las ganas de continuar, NO es fin.
Aunque la realidad te golpea sin piedad, aunque el tiempo parezca una condena, aunque la ansiedad te agobie y la tristeza te arrope, NO es el fin.
Aunque veas a tu alrededor buscando razones y no las encuentres, aunque creas que tú función aquí terminó, aunque sientas la impotencia del inmóvil, NO es fin.
Aunque parezca que siempre terminarán por imponerse los más “fuertes”, aunque creas que no el intento del débil es inútil, recuerda: NO es fin.
NO es el fin ni lo será mientras haya al menos una voz que se levante, una voluntad que no se doblegue, una conciencia que jamás logren comprar.
Venezuela, ahora es cuando. Sigo creyendo en ti.