Ni lavan ni prestan la batea
Fuimos convocados a elegir diputados a la Asamblea Nacional. Pero el país fue empeorando y prevaleció la urgencia de protestar la pésima conducción de los asuntos públicos.
Fue así como en vez de evaluar quiénes representaban mejor a municipios y estados por conocer cabalmente sus problemas, una marejada de votos reclamó cambios políticos y económicos a los cuatro vientos.
El voto mayoritario se expresó por la opción más conocida y segura, por aquella que había puesto el acento en ponerle un parao a los abusos del gobierno.
La voluntad mayoritaria quedó claramente expresada. Nada pudo la regaladera, las amenazas ni la multimillonaria campaña propagandística. Diarias cadenas presidenciales y minicadenas llamadas noticiarios de la patria tampoco convencieron a los venezolanos de que somos una potencia en la que reímos de felicidad.
Queremos que se acabe la impunidad con la que malandros, traficantes y sicarios diezman el país. Ya son 27.000 asesinatos al año. Las bandas se multiplican. Los pranes se jactan de su poder. Las policías y los tribunales corrompidos.
El gobierno nada ha hecho contra esa peste y las masacres se multiplican en todas partes. La nueva Asamblea tiene que aprobar soluciones para enfrentar y vencer la inseguridad.
Largas colas para comprar alimentos han mantenido secuestradas a millones de amas de casa desde hace dos años. Y todo porque expropiaron fincas y empresas, persiguieron y matraquearon comerciantes. Arrinconaron a la gente de trabajo y hoy no se produce casi nada. Todo se compra afuera. Para ñapa, desaparecieron los dólares y no hay con que importar.
Hay colas porque no hay producción. La nueva Asamblea Nacional está obligada a aprobar condiciones para que se creen empresas, para que renazca la producción, para que haya abastecimiento y mejore la calidad de vida.
Ahora resulta que el gobierno que no ha sido capaz de garantizar seguridad ni abastecimiento, se dedica a sabotear la instalación de la Asamblea y a desconocer la voluntad popular. Ni lavan ni prestan la batea.
@claudioefermin
@claudiocontigo